La enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), es una de las preocupaciones actuales entre los ganaderos de España y como no podía ser menos, también lo es entre los ganaderos de la Comunidad de Madrid.
La enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE) es una enfermedad vírica infecciosa no contagiosa transmitida por vectores (Culicoides spp.), que afecta a rumiantes domésticos y salvajes y que en el ganado vacuno puede producir clínica moderada y auto limitante durante unas dos semanas. El ganado ovino es susceptible a la infección, pero poco a la enfermedad clínica, y el caprino es muy poco susceptible a la infección.
Hasta pasado noviembre de 2022, esta enfermedad no había sido detectada en España, pero en la actualidad, se encuentra en fase de propagación habiéndose detectado focos en Andalucía, Extremadura y Castilla La Mancha. Desde el pasado 24 de julio, la Comunidad de Madrid se encuentra entre las provincias con restricciones de movimiento directo para vida (no así para sacrificio) por EHE hacia otros Estados miembros de animales bovinos, ovinos y caprinos
Ante la demanda de los ganaderos madrileños, como iniciativa, la Unión de Agricultores, Ganaderos y Silvicultores de la Comunidad de Madrid, UGAMA, organizó una jornada para informar y formar a los ganaderos de la región sobre la enfermedad EHE, con el fin de que conozcan a lo que se enfrentan y que medidas deben tomar para prevenirla.
La jornada celebrada en la localidad de Colmenar Viejo (Madrid), con la colaboración del Ayuntamiento, fue un éxito y en ella participó la Asociación Madrileña de Veterinarios Especialistas en Rumiantes, AMVER, y a la misma asistieron más de 50 personas, entre profesionales del sector, veterinarios, asociaciones de ganaderos y representantes de los grupos políticos de PSOE y VOX de la localidad.
Como conclusión, tanto representantes de UGAMA, como ganaderos y veterinarios, llegaron a la conclusión de instar a las distintas administraciones, desde las regionales hasta el Ministerio, a poner más medios con el fin frenar el avance de la enfermedad mediante una mayor investigación y el desarrollo de vacunas, ya que actualmente no existen vacunas autorizadas en la UE frente a esta enfermedad y las medidas de prevención que se recomiendan para el control de la enfermedad consisten en la lucha vectorial, mediante el empleo de insecticidas y repelentes en animales, medios de transporte e instalaciones, así como el uso de insecticidas y larvicidas para el control de las posibles zonas de cría.
