COAG satisfecha ante la decisión del Parlamento Europeo de rechazar la propuesta de reducir el uso de fitosanitarios en un 65% para 2030
La Comisión Europea había propuesto una reducción significativa en el uso de productos fitosanitarios con el objetivo de promover prácticas agrícolas más sostenibles. Sin embargo, esta propuesta generó una respuesta contundente de La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, COAG, que argumentó que sin alternativas eficaces y plazos realistas, los agricultores se encontrarían en una posición vulnerable frente a las plagas, lo que podría conllevar un incremento en el precio de los alimentos para el consumidor.
La Posición de COAG y el Impacto en la Agricultura
Miguel Padilla, Secretario General de COAG, señaló que la aprobación de este reglamento habría provocado una pérdida del 20% en la producción vegetal europea, según un informe de impacto de la Universidad de Wageningen. Esto no solo afectaría a los agricultores, sino también a la economía y la seguridad alimentaria en Europa.
COAG ha presentado varios argumentos clave en su oposición a la propuesta:
- Competencia Desleal: critican desde la OPA la hipocresía de no exigir las mismas condiciones a las importaciones de terceros países, lo que perjudica a los productores locales.
- Uso de Fondos PAC: La organización considera inaceptable utilizar fondos de la Política Agrícola Común (PAC) para financiar esta medida.
- Plazos Irrealistas: COAG argumenta que la fecha límite de 2030 no ofrece tiempo suficiente para una transición efectiva sin alternativas viables.
- Avances en el Uso Sostenible de Fitosanitarios: Se resalta el compromiso del sector agrícola con prácticas sostenibles y se critica la omisión de estos esfuerzos en la propuesta.
- Falta de Consulta con Agricultores: enfatiza, la citada asociación, la importancia de involucrar a los agricultores en la toma de decisiones que afectan directamente su actividad.
El rechazo del Parlamento Europeo a la propuesta de la Comisión es un paso importante para COAG y los agricultores europeos. Sin embargo, sigue siendo crucial que desarrollen estrategias realistas y sostenibles para la agricultura, siempre considerando la voz y las necesidades de los agricultores.
