Las tierras de cultivo en España han caído, desde 2018, en España un 1,35% hasta los 16.782.814 de hectáreas cuantificadas en 2023.
El panorama agrícola de España ha experimentado cambios significativos en 2023, según revela la Encuesta sobre Superficies y Rendimientos de Cultivos (ESYRCE).
Distribución de las Tierras de Cultivo
Esas tierras de cultivos se componen de 11,2 millones de tierras arables que incluyen cereales grano, barbechos, cultivos industriales, forrajes, leguminosas, hortalizas y flores, siendo 5,4 millones leñosos.
Este análisis profundo, llevado a cabo entre mayo y septiembre de 2023, ofrece una visión detallada de la evolución y las tendencias actuales en el sector agrario del país. Los resultados, obtenidos a través de observaciones de campo por especialistas, proporcionan una perspectiva esencial sobre las prácticas agrícolas y su impacto en el medio ambiente y la economía.
Cultivos Herbáceos y Tierras Arables
En 2023, los cultivos herbáceos han sufrido un descenso del 3,12% (8,3 millones de hectáreas), principalmente en cereales, tubérculos y cultivos industriales. Este declive es notorio en cultivos industriales como el algodón, girasol y colza, que han visto una reducción del 14% en su superficie. Sin embargo, los cultivos de leguminosas grano, como garbanzos y guisantes, han aumentado su superficie en un 50% en comparación con 2022, lo que representa un cambio significativo en el patrón de cultivo.
La reducción de cereales ha sido especialmente notable, con una disminución general del 3,95% hasta situarse en 5,7 millones de hectáreas.
El arroz y el maíz han sido particularmente afectados, registrando la menor superficie cultivada en los últimos veinte años, en gran parte debido a la prolongada sequía, el primero soporta una bajada del 6,5% con 57.884 hectáreas plantadas y, el segundo, del 18,55% pues la sementera apenas ha llegado a las 249.249 has.
El trigo blanco pierde casi un 6% de su superficie previa aunque alcanza los 1,7 millones de hectáreas, mientras que la reducción de la cebada se centra, porcentualmente, en la de seis carreras que pierde un 15% hasta las 126.131 mientras que la de «dos carreras» sólo pierde un 1,7% hasta caer a los 2,3 millones de hectáreas.
El trigo duro pierde un 12% de superficie con 328.997 has; y el centeno un 12% para situarse en 110.114.
La avena es de los pocos cereales que repunta y lo hace casi en un 22% sumando 461.327 has, mientras que el triticale repite la cifra anterior rondando las 200.000 has.
Tierras dedicadas a Leguminosas
Las leguminosas grano es el único grupo de cultivos herbáceos que aumenta su superficie respecto al año anterior, ganando casi un 50%, en gran medida gracias a la nueva PAC, para llegar a las 491.055 hectáreas. Destaca el incremento de garbanzos que casi suplica la sementera al alcanzar las 60.856 hectáreas, guisantes secos que viven un alza porcentual del 55,86% hasta sumar 171.259 has, un 21% crece la superficie dedicada en España a las vezas grano cuantificando 91.683 has, mientras que los yeros ven como las hectáreas en las que se han sembrado esta campaña llegan a las 93.962 has.
Las lentejas son las únicas leguminosas que decrecen respecto al año 2022, perdiendo casi un 3% de superficie aunque todavía alcanzan las 38.871
Barbechos y Sostenibilidad
El informe de ESYRCE 2023 muestra un aumento del 6,93% en tierras de barbecho, llegando hasta los 2,8 millones de hectáreas. Este incremento refleja una tendencia hacia prácticas agrícolas más sostenibles y podría estar relacionado con las políticas de la Política Agraria Común (PAC) de la UE. El aumento de las tierras de barbecho con infraestructuras de riego sin sembrar es un indicador clave de este cambio, cuantificando el ascenso en un 24,27% para sumar 149.505 hectáreas.
Cultivos Leñosos y Expansión de Frutales
Los cultivos leñosos han experimentado un aumento del 0,70% en 2023 llegando a sumar 5,4 millones de hectáreas.
Aquí, el viñedo se sitúa en las 945.111 has, mostrando una gran estabilidad pues la reducción es de apenas el 0,31% en gran medida ante la situación que vive la uva de vinificación.
Los frutales no cítricos, especialmente el almendro y el pistacho, han mostrado un crecimiento significativo. El aguacate, arándanos y el mango también han visto un aumento considerable en su superficie, reflejando una tendencia hacia cultivos más diversificados y posiblemente más rentables, ganando casi 3.000 has en 2022.
Ligera subida del 0,72% de la superficie de olivar hasta llegar a los 2,7 millones de hectáreas, mientras que los cítricos bajan casi un 1% con las 306.703 hectáreas contabilizadas en este informe.
Cultivos Industriales y Hortícolas: Una Mirada Detallada
El grupo de cultivos industriales ha sufrido el mayor descenso en superficie en 2023, perdiendo casi un 14% de la superficie sembrada de los mismos que se sitúa en las 965.887 toneladas
El algodón y el tabaco han registrado la menor superficie en veinte años con 46.792 y 4.884 has que suponen caídas interanuales del 21,35 y el 10%.
Sin embargo, ha habido un aumento notable en cultivos específicos como el cártamo y la remolacha azucarera, el primero crece un 43% llegando a las 18.608 hectáreas y el segundo un 36% hasta sumar 30.461 has.
Por otro lado, el grupo de hortalizas y flores ha experimentado un menor descenso, pues la disminución es del 0,7% hasta las 230.231 has. Cultivos como el guisante verde y el melón han disminuido, cayendo el primero casi un 33% hasta las 7.840 has y el segundo casi un 19% para contabilizarse 17.671 has , mientras que otros como la sandía, el pimiento y el tomate han visto un aumento en su cultivo.
La sandía gana un 38% de superficie hasta las 12.171 has; un 14% el pimiento para llegar a las 11.248 y casi un 14% el tomate que registra 14.606 has.
Forrajes
La superficie dedicada a forrajes, según revela la Encuesta sobre Superficies y Rendimientos de Cultivos (ESYRCE), cae casi un 4% para situar este dato en las 928.210 has
La alfalfa cae un 1,62% hasta las 211.721 has
