Unión de Campesinos de Segovia–UCCL está realizando una ronda de asambleas informativas por las zonas más afectadas, concretamente en las localidades de Torrecaballeros, Prádena y El Espinar, con el fin de informar y obtener información del alcance real de la enfermedad.
Desde que empezaran a aparecer los primeros casos a principios de agosto, la evolución de esta enfermedad ha sido fulgurante, de manera que hoy podemos decir que afecta a la inmensa mayoría de las explotaciones de nuestra provincia. Sin embargo, esta enfermedad ya había aparecido varias semanas antes en Salamanca de forma virulenta, sin que, desde los servicios veterinarios oficiales, se hubiera facilitado ningún dato, ni producido alerta alguna al respecto.
Hoy el sector se encuentra ante un gravísimo problema sanitario de los animales, que está produciendo pérdidas enormes a los ganaderos, y que de momento no está encontrando respuesta alguna por parte de los servicios de sanidad animal de la administración competente en la materia, que es la Junta de Castilla y León.
Tampoco el Ministerio de Agricultura está a la altura de lo que está ocurriendo, máxime cuando esta enfermedad ya había hecho aparición en el Sur del país el año pasado, sin que se dispongan de datos, al menos conocidos, del impacto de la misma en los animales, tanto en el momento del brote, como en los meses siguientes. La negligencia del ministerio se refleja claramente en las actualizaciones de focos existentes que publica, totalmente extemporáneas y fuera de la realidad, no reflejando ni un mínimo de los focos reales que existen.
Mientras la pasividad de las administraciones públicas empieza a ser más que preocupante, los ganaderos están padeciendo gravísimas pérdidas en sus explotaciones, temiendo además las que les puedan sobrevenir por los efectos secundarios de la enfermedad, de los que poco o nada se sabe hasta la fecha.
Por ello, Unión de Campesinos e Segovia-UCCL ha solicitado una reunión con el Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León en Segovia, a fin de conocer lo que se está haciendo al respecto de esta enfermedad, si es que realmente se está haciendo algo.
Por último, destacar que la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica es una enfermedad vírica, transmitida por un mosquito del género culicoide, que afecta exclusivamente a los animales rumiantes, y que en ningún caso es transmisible a las personas. Lo realmente grave de esta enfermedad son las enormes pérdidas económicas que genera a los ganaderos, y las secuelas psicológicas, al ver con impotencia como se degrada una explotación ganadera que cuesta muchos años sacar adelante.