La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) mira con preocupación como, por un lado, la aplicación del Coeficiente de Admisibilidad de Pastos (CAP) y la revisión de los usos del SigPac, ha conllevado a una reducción de las hectáreas admisibles sobre superficies de pastos en determinadas zonas, y por otro lado, la incertidumbre de los ganaderos al realizar una solicitud de ayudas PAC o de incorporación de agroambientales, con un desconocimiento absoluto de las hectáreas admisibles que dispondrá en la campaña 2015.
El CAP es un coeficiente que se aplica a las superficies de pastos que presenten características que impidan un aprovechamiento total de las mismas por la presencia de elementos improductivos tales como roquedales, zonas sin vegetación, así como pendientes elevadas u otras características se les asignará en el Sistema de Información Geográfica de Parcelas Agrícolas (SIGPAC) un coeficiente que refleje el porcentaje de admisibilidad a nivel de recintos Sigpac.
A fecha de hoy, hay provincias de Castilla y León que aún no conocen que coeficiente se le va a aplicar a las superficies de pastos, esto conlleva a que, los ganaderos cuando tramiten su solicitud de ayudas directas de la PAC o soliciten la incorporación a una ayuda agroambiental, no conocerán las hectáreas admisibles que dispondrán en la campaña 2015, y por tanto, no sabrán si disponen de superficie suficiente para desarrollar su actividad agraria, ni hacer una previsión de los derechos de pago básico que se le asignaran en el 2015.
Al malestar de los ganaderos se suma el de los os ayuntamientos y Juntas Vecinales, que son los titulares de los pastos, que ven con cierta incertidumbre, como realizarán la adjudicación de los pastos sin conocer el coeficiente de admisibilidad que se va a aplicar sobre esas superficies.
Ante todas estas circunstancias, UCCL solicita que se agilice los trámites para aplicar el Coeficiente sobre todas las superficies de pastos de Castilla y León, para evitar que los ganaderos tengan que acudir a tramitar sus ayudas PAC y las ayudas Agroambientales, con una “venda en los ojos”, al desconocer la superficie admisible que dispondrá.
