APRORA, la Asociación para la Promoción del Olivo y el Aceite de Rioja Alavesa, ha dado a conocer los datos de la cosecha de este año, calificándola como histórica por la baja producción tanto de aceitunas como de aceite.
Frente a los 875.000 Kg de aceitunas molturados en las almazaras de APRORA en 2021 este año se han molturado solamente 395.000 Kg, lo que supone un descenso del 55% en kilos de aceitunas. Esta disminución es mayor en cuanto a litros de aceite obtenidos, porque también ha habido mal rendimiento debido a la sequía y al reducido tamaño de los frutos. Se han obtenido 72.000 litros de aceite frente a loss175.000 de 2021, es decir un 60% menos.
A esto hay que añadir que la sequía de 2022 ha hecho que los olivos desarrollen menos crecimiento vegetativo del que sería normal y deseable: como la floración y posterior fructificación se da principalmente en las ramas desarrolladas el año anterior, para este 2023 no esperamos una recuperación sustancial en la próxima cosecha.
Según APRORA, años como este hacen ver con más claridad la necesidad de riego en el olivar alavés y también la de un plan director o estratégico que evite el abandono de los olivos tradicionales y que anime a otros a realizar nuevas plantaciones, más adaptadas a la mecanización, sobre todo la recolección mecanizada porque, de otro modo y sin relevo generacional, asistiremos al abandono de muchos olivares.
