La red de supermercados asociados a ASEDAS, la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados, se suma a la Gran Recogida de Alimentos de FESBAL, la Federación Española de Bancos de Alimentos, en una iniciativa que involucra a más de 10.000 tiendas distribuidas por toda España. Desde hoy hasta el 6 de diciembre, voluntarios de FESBAL estarán presentes en estos establecimientos para recoger donaciones y fomentar la solidaridad en la lucha contra la inseguridad alimentaria.
La Gran Recogida, que se celebra anualmente, es una de las mayores movilizaciones solidarias del país, y este año destaca por la participación masiva de supermercados de la asociación ASEDAS. Esta acción, que inicialmente se lleva a cabo entre el 24 y el 26 de noviembre, se extiende en muchos establecimientos hasta el 6 de diciembre para maximizar la recolección de alimentos y fondos destinados a ayudar a las personas vulnerables.
Una tendencia emergente en esta edición es la creciente adopción de la donación económica en caja en lugar de la tradicional recogida física de alimentos. Esta modalidad permite a los clientes realizar donaciones monetarias al momento de pagar sus compras, lo que agiliza la logística y facilita una canalización más efectiva de la ayuda hacia aquellos que la necesitan. Esta opción no solo mejora la eficiencia de la operación, sino que también proporciona flexibilidad a los Bancos de Alimentos para canjear donaciones según sea necesario y elegir productos que contribuyan a dietas variadas y completas.
Recogida de alimentos en los supermercados
FESBAL ha movilizado este año a unos 90.000 voluntarios, quienes desempeñarán funciones de información y apoyo logístico en aquellos casos donde se mantiene la tradicional donación en especie. La Gran Recogida del año anterior logró una recaudación significativa de 25 millones de euros, destinados a prestar servicios a más de un millón de beneficiarios en todo el país.
Aunque la Gran Recogida de Alimentos destaca como la acción social más visible en los supermercados, el compromiso social de las empresas de distribución alimentaria se extiende durante todo el año. Estas empresas trabajan continuamente con entidades de proximidad a través de programas de donación de alimentos, con el objetivo dual de brindar acceso a una dieta equilibrada y reducir el desperdicio alimentario.
Se estima que las empresas asociadas a ASEDAS colaboran habitualmente con alrededor de 500 entidades que ofrecen ayuda alimentaria a más de 100.000 personas en situación de vulnerabilidad. Este compromiso constante refleja la importancia de la responsabilidad social corporativa en el sector de la distribución alimentaria, contribuyendo no solo a la seguridad alimentaria de la población, sino también a la reducción del impacto del desperdicio de alimentos en la sociedad.
La participación activa de los supermercados de ASEDAS en la Gran Recogida subraya la relevancia del trabajo conjunto entre el sector privado y las organizaciones benéficas para abordar los desafíos sociales más apremiantes. La solidaridad en los pasillos de los supermercados se convierte en un símbolo tangible de la capacidad de la sociedad y las empresas para unirse en la lucha contra la inseguridad alimentaria y hacer una diferencia significativa en la vida de aquellos que más lo necesitan.
En este contexto, la donación en caja emerge como una opción conveniente y eficaz, especialmente en un entorno donde las transacciones sin contacto y la agilidad en el proceso de compra son cada vez más valoradas. La adopción de esta modalidad no solo simplifica el procedimiento para los donantes, sino que también refleja la adaptabilidad de las iniciativas solidarias a las cambiantes dinámicas del consumidor. Además, la posibilidad de realizar donaciones a través de compras en línea amplía el alcance de la contribución, permitiendo que aquellos que no pueden visitar físicamente los supermercados participen de manera activa en esta noble causa.
El llamado de FESBAL a unos 90.000 voluntarios destaca la importancia del compromiso comunitario en la lucha contra la inseguridad alimentaria. Estos voluntarios desempeñan un papel crucial al proporcionar información y apoyo logístico durante la Gran Recogida. Su dedicación y esfuerzos contribuyen directamente al éxito de la iniciativa, subrayando la importancia de la colaboración entre ciudadanos comprometidos, organizaciones benéficas y empresas del sector alimentario.
Además de ser una acción clave para concienciar sobre la importancia de la solidaridad, la Gran Recogida de Alimentos destaca cómo la industria de la distribución alimentaria no solo se preocupa por satisfacer las necesidades inmediatas de los consumidores, sino que también asume un papel activo en abordar problemas sociales más amplios. Este enfoque integral va más allá de la mera transacción comercial y demuestra el impacto positivo que las empresas pueden tener en sus comunidades. La iniciativa no solo responde a la urgencia de la situación, sino que también establece un precedente valioso para prácticas sostenibles y responsables en el sector.
La colaboración continuada entre ASEDAS y las entidades benéficas a lo largo del año resalta un compromiso constante con la responsabilidad social. Al trabajar con alrededor de 500 entidades y llegar a más de 100.000 personas, estas empresas no solo abordan la seguridad alimentaria, sino que también desempeñan un papel activo en la construcción de comunidades más fuertes y resilientes. Este enfoque holístico refleja el poder transformador de la colaboración entre el sector privado y las organizaciones sociales, marcando un camino hacia un futuro donde la solidaridad y la sostenibilidad se integren de manera más profunda en las operaciones empresariales diarias.
