La organización APAG Extremadura ASAJA confirma las terribles consecuencias ocasionadas por plagas y enfermedades en las cosechas cerealistas de diversas zonas de la provincia de Badajoz, especialmente para el trigo.
Cuando la recolección del cereal se sitúa en torno al 70%, con la recolección de la cebada finalizada, la avena al 85%, y el trigo al 55%, se constata que, si bien los cultivos de cebada y avena registran producciones normales, en lo que se refiere al trigo, las producciones obtenidas han sido muy bajas, oscilando su producción en torno a los 1.200-1.600 kg./hc., lo que se traduce en una verdadera ruina para los agricultores.
Estos resultados son cuanto menos incomprensibles, si atendemos a las óptimas condiciones climatológicas en las que se ha desarrollado el cultivo. El único motivo de tal catástrofe ha sido la mala política fitosanitaria que se ha venido desarrollando desde la Consejería de Medio Ambiente, Rural, Políticas Agrarias y Territorio para poner solución a este peligro para la agricultura extremeña.
La falta de medidas para atajar de raíz plagas como el gusano de alambre o el denominado ‘mayetiola destructor’ –más conocido como ‘mosquito de trigo’–, ha provocado que la cosecha de este cereal tan importante para Extremadura se haya visto extremadamente mermada en la campaña de este año.
Ante esta circunstancia, APAG Extremadura ASAJA pide a la Consejería de Medio Ambiente que lleve a cabo un estudio de identificación de parcelas afectadas por plagas y enfermedades para adoptar las acciones necesarias con el fin de que los agricultores puedan sembrar en campañas venideras sin temor a que vuelva a reproducirse este tipo de plagas que tanto pejudican al sector cerealista.
