Las bodegas españolas, reconocidas mundialmente por sus vinos de alta calidad, enfrentan ahora un reto significativo: la gestión de contaminantes metálicos como el arsénico, cadmio y plomo. Este desafío no solo implica la salud pública sino también el cumplimiento de estrictas normativas europeas de Seguridad Alimentaria. Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) han profundizado en este tema, buscando evaluar la efectividad con la que estas bodegas gestionan los riesgos asociados a estos contaminantes.
Metodología Innovadora para el Control de Metales Pesados en los vinos españoles
El estudio, liderado por Jesús López Santiago de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas, ha introducido una metodología basada en encuestas que sintetiza el desempeño de las bodegas en tres indicadores clave: formación, cumplimiento legislativo y análisis fisicoquímicos. “Nuestra intención es ofrecer una herramienta que permita a los bodegueros identificar de manera eficiente los Puntos Críticos de Control y mejorar continuamente”, explica López Santiago.
Hallazgos Principales y Áreas de Mejora
Aunque se han hecho avances significativos, la investigación revela que la identificación de legislación aplicable y el control de Puntos Críticos de Control relacionados con metales pesados necesitan ser mejorados. “Un tercio de las bodegas todavía carece de datos completos sobre las concentraciones de estos contaminantes en sus suelos y productos”, señala María Teresa González Villarino, coautora del estudio.
Brechas en el Cumplimiento y Equipamiento Técnico
El estudio subraya una falta generalizada de equipos adecuados para el análisis de metales pesados, lo que representa una barrera significativa para la gestión eficiente de la contaminación. Solo un pequeño porcentaje de bodegas dispone de equipos de espectrometría modernos, necesarios para detectar y cuantificar estos contaminantes de manera precisa.
Implementación de Sistemas de Gestión de Seguridad Alimentaria
La investigación sobre los vinos españoles también destaca que la mayoría de las bodegas han adoptado Sistemas de Gestión de Seguridad Alimentaria (FSMS), incluyendo Programas de Prerrequisitos y el Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control. “Existe una correlación positiva entre la capacitación del personal y la mejora en la gestión de los PCC”, apunta Ana Isabel García, otra investigadora del equipo.
Recomendaciones y Perspectivas Futuras
Los investigadores recomiendan que las bodegas intensifiquen su esfuerzo en conocer y aplicar la legislación vigente sobre los vinos y en capacitar a su personal adecuadamente. Además, sugieren que las administraciones públicas deberían ofrecer más soporte, facilitando acceso a tecnología avanzada para análisis más precisos.
Conclusiones del Estudio: Un Llamado a la Acción para Mejorar la Seguridad Alimentaria
El estudio concluye que, si bien se han realizado progresos, aún queda un largo camino por recorrer para asegurar que todos los vinos producidos en España sean seguros y libres de contaminantes metálicos peligrosos. La colaboración entre bodegas, legisladores y entidades educativas será crucial para superar estos desafíos.
Referencia: López-Santiago, J., García, A. I. G., Villarino, A. G., Som, A. M., & Gómez-Villarino, M. T. (2024). Assessing wineries’ performance in managing critical control points for arsenic, lead, and cadmium contamination risk in the wine-making industry: A survey-based analysis utilizing performance indicators as a results tool. Heliyon, 10(1). https://doi.org/10.
