La organización agraria Unión de Uniones, en relación con la prevención de daños causados por la fauna silvestre a la agricultura y la ganadería, ha expresado su preocupación y descontento ante la aparente desatención por parte de los Ministerios de Agricultura (MAPA) y de Transición Ecológica (MITECO). Según denuncian, ambas entidades gubernamentales se están desentendiendo de cumplir con la disposición adicional novena de la Ley 30/2022, que estipulaba la presentación de un Proyecto de Ley de Gestión de la fauna cinegética y otra fauna silvestre antes del 3 de octubre de 2022.
La Ley 30/2022, asociada a la Política Agraria Común (PAC), incluye en su disposición adicional novena la obligación de que el Gobierno presente un proyecto de ley para la gestión de fauna cinegética y silvestre, con el propósito de controlar y prevenir los daños causados a la agricultura y la ganadería. Este proyecto debía ser presentado en un plazo de nueve meses a partir de la entrada en vigor de la ley, lo cual expiró el 3 de octubre de 2022.
Ante la ausencia de dicho proyecto, Unión de Uniones ha requerido respuestas de los ministerios involucrados, obteniendo respuestas que califican como decepcionantes. El MAPA alega tener competencias solo en materia cinegética, trasladando la responsabilidad al MITECO, encargado de biodiversidad. Por su parte, el MITECO se niega a redactar el proyecto, alegando falta de información sobre los daños causados. Además, sostiene que la Ley 42/2027 del Patrimonio Natural y la Biodiversidad permite excepciones a la protección de la fauna silvestre solo en casos donde no exista otra alternativa o solución satisfactoria y sin perjudicar la conservación de las poblaciones.
Unión de Uniones considera estas respuestas como excusas para evadir responsabilidades y no abordar el grave problema de los daños a cultivos y la ganadería causados por la fauna silvestre. La organización destaca que el problema está en aumento, con perjuicios económicos cada vez mayores y, en muchos casos, imposibilidad de asegurar las producciones afectadas. Critican la falta de información sobre los daños y señalan que la protección de los cultivos no es una solución eficaz en muchos contextos, como lo demuestra la inutilidad de vallas y protectores en zonas de explosión poblacional de fauna.
Daños causados por la fauna silvestre
Además de los daños directos a los cultivos, Unión de Uniones alerta sobre el impacto en la ganadería, ya que la fauna silvestre puede actuar como reservorio de enfermedades del ganado, como la tuberculosis, que lleva al sacrificio de miles de vacas anualmente.
La organización reprocha a MAPA y MITECO la falta de iniciativa para orientar una posible ley que coordine acciones entre las comunidades autónomas y evalúe los daños causados. También insta a asignar presupuesto para controlar la población de fauna silvestre en áreas específicas y compensar los daños a la agricultura debido a una gestión deficiente.
Ante esta situación y otros problemas que afectan al sector agrario, Unión de Uniones ha convocado un acto de protesta para el próximo 21 de febrero en Madrid, que concluirá frente al Ministerio de Agricultura. La organización busca visibilizar las preocupaciones del sector y presionar al gobierno para que tome medidas efectivas.
En el marco de la creciente preocupación por los daños a la agricultura y ganadería, Unión de Uniones aborda la necesidad de una legislación específica que coordine las acciones a nivel nacional y evalúe los impactos de manera efectiva. En este sentido, consideran crucial que MAPA y MITECO se involucren activamente en la elaboración de un proyecto de ley que contemple la complejidad de la problemática y establezca medidas adecuadas.
La falta de información argumentada por los ministerios es rebatida por la organización, que sostiene que la ausencia de un inventario de daños no debería ser una barrera para abordar el problema. Unión de Uniones aboga por una mayor transparencia y recopilación de datos sobre los daños ocasionados por la fauna silvestre, de manera que se puedan tomar decisiones informadas y aplicar soluciones adaptadas a cada situación.
La organización destaca la importancia de abordar el problema desde una perspectiva integral, considerando no solo los daños directos a los cultivos, sino también las implicaciones para la ganadería y la salud pública. La fauna silvestre, al actuar como reservorio de enfermedades, plantea un riesgo significativo para la sanidad animal, lo que resalta la necesidad de medidas preventivas y de control poblacional.
En el contexto de la convocatoria de protesta para el 21 de febrero en Madrid, Unión de Uniones busca no solo expresar su descontento sino también movilizar a la comunidad agraria y sensibilizar a la opinión pública sobre la urgencia de abordar estos problemas. La manifestación se presenta como una oportunidad para que los agricultores y ganaderos exijan respuestas concretas a sus preocupaciones y presionen al gobierno para que asuma un papel proactivo en la resolución de estos desafíos.
