ASAJA León comenzará el próximo lunes el servicio de tramitar las ayudas de la PAC a sus socios, una labor que se prolongará hasta el 14 de mayo. Durante este tiempo, esta organización agraria de la provincia pedirá las ayudas a cerca de 3.000 agricultores y ganaderos de la provincia, representando un 35% de los 95 millones de euros que llegarán al sector en concepto de ayudas directas (ayudas de pago base y ayudas acopladas a la producción). La organización agraria ASAJA viene desarrollando esta importante labor de servicios desde el año 1993, y para ello viene suscribiendo acuerdos de colaboración con las principales entidades financieras que operan en la provincia y manteniendo una estrecha coordinación con los departamentos correspondientes de la consejería de Agricultura y Ganadería.
Durante los próximos dos meses, tal y como señalan desde Asaja, este es el servicio más importante que presta la organización, pero no el único, pues coincide también con servicios fiscales, con las ayudas a la modernización de las explotaciones y la incorporación de jóvenes, y con la campaña de seguros agrarios. Los veinte técnicos que durante este periodo trabajarán en la organización, todos ellos con experiencia de años anteriores y formados en ASAJA, atenderán a los socios en las oficinas del sindicato agrario en Ponferrada, Sahagún, Valencia de Don Juan, La Bañeza, León capital, Santa María del Páramo y Carrizo de la Ribera.
Esta labor de gestión de las ayudas ha venido precedida de una amplia campaña informativa sobre la nueva normativa, tanto en publicaciones propias como en jornadas y reuniones informativas, y el trabajo no concluye hasta que el agricultor no percibe los fondos, pues con frecuencia hay que reformar los expedientes, se detectan errores administrativos, hay que asistir a los socios ante inspecciones de campo, o se requiere de recursos y reclamaciones.
«La Unión Europea y las autoridades españolas no han sido capaces de simplificar la gestión de la PAC, que se ha convertido en extraordinariamente compleja este año 2015 al asignarse por vez primera los derechos de pago base y establecerse un complemento de pago verde» apuntan desde la organización. Además, se están gestionando las ayudas agroambientales del nuevo Programa de Desarrollo Rural, sujetas también a una normativa específica. Y por último, uno de los elementos más distorsionadores de esta nueva PAC es la aplicación del “coeficiente de admisibilidad de pastos”, que ha dejado sin uso ganadero el 67,5% de los pastos arbolados y el 43,5% de los patos arbustivos de la provincia de León, un problema que requiere de mucho trabajo administrativo y de voluntad de la Junta para minimizarlo en lo posible.
