Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, ante la sequía que está amenazando a gran parte de los cultivos a nivel estatal, ha elaborado un documento de 50 propuestas concretas orientadas a frenar las consecuencias y el impacto de la prolongada falta de lluvias en el campo.
Unión de Uniones, en primer lugar de acuerdo con los fuertes episodios de sequía que se están dando con más regularidad de la debida, propone la creación de una normativa que contemple una batería de medidas para paliar sus efectos. Esta debería ser de activación automática en base a una serie de indicadores de cara a poner para el sector medidas desde que se produce.
La organización señala que esta situación está dificultando el cumplimiento de los requisitos de la PAC. En este sentido, propone que se tenga en consideración a efectos del cumplimiento de requisitos de agricultor activo, se apliquen flexibilizaciones en condicionalidad, ecorregímenes, ayudas asociadas y desarrollo rural, para que no se vean reducidos los importes y el campo pueda adaptarse a la situación actual sin someterse a penalizaciones. En esta misma línea, propone que realicen los anticipos de la PAC a fecha de 16 octubre y con el máximo porcentaje posible.
Asimismo, pide que se aplique el reglamento de ayudas de mínimis. La organización recuerda que todas las administraciones, incluidas las autonómicas y legales, tienen la potestad de instrumentar ayudas de mínimis con sus propios fondos. Igualmente, solicita que se activen los mecanismos de reserva de crisis así como se declaren zonas emergencia de protección civil a todas las afectadas por la sequía.
Por lo que concierne a medidas fiscales y de financiación, la organización propone la exención en el pago de cuotas de tarifas del agua, IRPF, las cuotas a la Seguridad social, el IBI y la reducción de tasas por servicios agropecuarios en el primer caso, mientras que en el segundo reclama el acceso a subvenciones de avales de SAECA, préstamos ICO y apoyo complementario para los agricultores y ganaderos profesionales. En cuanto a ayudas directas, reclama como en otras ocasiones un Fondo Extraordinario de sequía dotado de forma suficiente para aplacar la catástrofe que se está viviendo.
Unión de Uniones reclama a ENESA que dote a la subvención del seguro la cantidad suficiente para alcanzar el máximo de subvención permitido por la UE para los profesionales así como celeridad en la tasación y pago de los daños y la revisión integral del seguro de pastos y cobertura de sequía en apicultura.
Con respecto a la captación y distribución del agua, la organización cree indispensable que se pongan en marcha ayudas a la inversión en infraestructuras y sistemas de captación de aguas y para la modernización y rehabilitación de las estructuras de regadío y, con respecto al sector ganadero, se den las garantías para el abastecimiento de agua, así como para el incremento de costes por alimentación adicional en ganadería y apicultura a causa de la sequía.
«Si no actúa con urgencia el Gobierno es que no es consciente de la magnitud del problema y le da la espalda al sector. Nos negamos a que en la Mesa de Sequía se maree la perdiz y no se tome ninguna decisión», comentan desde la organización. “No estamos para que nos digan lo mal que estamos, Gobierno y CCAA tienen que salir de la Mesa de Sequía con medidas concretas e inmediatas, como mínimo y la situación exige de hecho una intervención directa de Pedro Sánchez.”, añaden.
Andalucía, Extremadura, Cataluña y Comunitat Valenciana, las más afectadas
La organización agraria destaca las regiones de Andalucía, Extremadura, Cataluña y Comunitat Valenciana como las más afectadas por la sequía hídrica y meteorológica que recuerda a la de 2017 y que, sumado a la situación actual del sector, no hace más que poner más trabas al trabajo de los agricultores y ganaderos.
Por lo que concierne a Andalucía, el canal del bajo Guadalquivir, por ejemplo, ya no dispone de agua para riego. Este estrés hídrico para los cultivos provoca que muchos decidan regar sólo para mantener el árbol y olvidarse de la cosecha.
En la situación concreta del algodón, se están llevando a cabo las siembras al no haber condiciones (tempero) para poder desarrollarla. Del total de aproximadamente 50.000has. de cultivo, se prevé que para más de 40.000 has. no habrá posibilidades de riego. Todo esto, según apuntan las fuentes consultadas de AGAMA, está poniendo en jaque el 70% de las rentas de estas explotaciones.
Extremadura, por su parte, cifra su pérdida en 240 millones de euros y apunta a que, en lo referido a cereal de invierno, el daño se valora en casi el 100% de la cosecha y añade que más de 16.000 hectáreas de maíz y más de 6.000 hectáreas de arroz se van a quedar sin sembrar por no tener dotación de agua para riego.
En Cataluña, es Lleida la provincia que más está acusando la sequía, fundamentalmente la más agraria. Los frutales (melocotones, nectarinas, manzanas y peras) se encuentran demandan una gran cantidad de agua y su cosecha, a partir de junio, podría verse comprometida. Lo mismo que la de los cereales de invierno.
En Castilla y León se encuentra afectada una parte muy importante de la superficie de secano de cultivos de invierno, como consecuencia del anormal desarrollo vegetativo de dichos cultivos, debido a la ausencia de una adecuada humedad en el subsuelo y a las heladas. Si en los próximos 10-20 días la previsión de lluvia se hiciera patente, parte de la producción podría recuperarse siempre que el cultivo no espigue o no se hiele. Si no llueve se podría estar hablando de una pérdida del 70% de la producción.
Por lo que concierne Castilla – La Mancha, están en jaque los viñedos, el olivar y los cereales si no llueve en los próximos días, mientras que desde la Comunitat Valenciana apuntan a pérdidas de 35% de cereales de invierno.
Asimismo, Unión de Uniones destaca que, si bien la sequía afecta de manera directa a la agricultura, también lo hace a la ganadería y apicultura, al depender de pastos y floraciones naturales a pesar de que no se le dé tanto espacio en los medios de comunicación.
La organización agraria señala la situación de escasez de pastos para ganadería extensiva y pone de manifiesto la obligatoriedad de sustituir la alimentación tradicional, con la adquisición de piensos, forrajes, etc., a lo que, se debe añadir la necesidad de llevar agua para el censo ganadero afectado utilizando cisternas, ya que los estanques naturales se encuentran sin el líquido elemento.