El coordinador regional de UCCL, Jesús Manuel González Palacín, criticó hoy duramente el reglamento de la Consejería de Agricultura y Ganadería que deja abierta la puerta a la certificación privada de la Agricultura Ecológico y defendió que esta labor la tiene que seguir haciendo el Consejo de Agricultura Ecológica de Castilla y León (Caecyl). En este sentido, dijo que es una «barbaridad» que no están dispuestos a consentir. «Nadie entendería que una empresa privada certificara los vinos de Ribera de Duero», sentenció.
Además, sostuvo que las empresas privadas son las que más fraude cometen porque son empresas que van a ganar dinero. En este punto, el presidente del Consejo de Agricultura Ecológica, Juan Senovilla, aseguró que esta decisión les ha dolido porque Caecyl tiene «una reputación adquirida» que no justifica ese cambio y acusó a la Consejería de Agricultura y Ganadería de creer que de este modo va a aumentar la producción. También subrayó que durante los últimos ocho años se ha trabajo intensamente para que la certificación fuera «equitativa, sin discriminación y que atendiera a todos los operadores».
Senovilla realizó estas declaraciones en la presentación de la candidatura de UCCL para la renovación de los vocales del Consejo, cuyas elecciones se celebrarán el próximo lunes. Así se elegirán los seis vocales, en la actualidad todos representantes de UCCL. Pueden acudir a votar 534 productores y 147 industrias. El actual presidente hizo un llamamiento a la participación a pesar de que la convocatoria se hace en plena cosecha.
Ayudas
Por otro lado, UCCL reclamó a la Junta que convoque las ayudas a este sector, que llevan dos años sin salir, porque se trata de una actividad que supone una alternativa para los pequeños agricultores y ganaderos. Y lamentaron que Castilla y León se encuentre a la cola e España y de Europa con el gran potencial que tiene, en un momento en el que la PAC otorga gran importancia a la agricultura ecológica al vincular el 30 por ciento de las ayudas a compromisos medioambientales.
Asimismo, desde UCCL insisten en exigir a la Consejería la puesta en marcha de un plan estratégico específico para el sector que respalde la calidad y la comercialización de los productos. En su opinión, es una cuestión de «presupuesto y voluntad política». El plan tienen que establecer una política específica en «investigación, fomento de la actividad y formación», precisó Senovilla.
