Unión de Uniones ha respaldado las conclusiones de un informe elaborado por economistas agrarios, que señala la necesidad de mejorar el Sistema de Precios de Entrada (EPS) de la Unión Europea para las importaciones de frutas y hortalizas. En medio de la creciente competencia desleal, la organización aboga por fortalecer este mecanismo y complementarlo con medidas adicionales para salvaguardar la estabilidad de los mercados internos y proteger a los agricultores europeos.
El informe, titulado «The Import Effects of the Entry Price System», destaca la complejidad de la normativa que rige el mercado europeo de frutas y hortalizas. El EPS establece un precio mínimo para los productos importados con el objetivo de evitar desestabilizaciones en los mercados internos y limitar el comercio para estabilizar el mercado comunitario. Sin embargo, los datos revelan que este mecanismo es menos efectivo para productos menos perecederos, como manzanas, peras o limones
Desafíos actuales del Sistema de Precios de entrada
A pesar de su función como barrera comercial protectora, el EPS no ha evitado importaciones que han presionado a la baja los precios internos, como se evidenció en el caso de las importaciones de tomate de Marruecos. Unión de Uniones destaca la necesidad de replantear el enfoque actual, proponiendo la elaboración de un índice de precios sintético y simple basado en la evolución de los precios intracomunitarios. Además, la organización insta a mejorar la recopilación de datos sobre precios para garantizar su precisión y veracidad.
La simplificación del sistema no solo es esencial para mejorar su eficacia interna, sino que también desempeña un papel crucial en las negociaciones comerciales internacionales. Unión de Uniones enfatiza la importancia de garantizar que las preferencias comerciales otorgadas a terceros países respeten el principio de preferencia comunitaria, un fundamento esencial de la Unión Europea
La organización destaca que el modelo agrícola europeo es reconocido como uno de los más éticos y exigentes del mundo. Sin embargo, subraya que su mantenimiento conlleva un costo económico significativo tanto para los productores como para los consumidores. Ante esto, Unión de Uniones aboga por fortalecer el EPS, dotándolo de mayor transparencia en su aplicación y complementándolo con otros instrumentos, incluidos controles fronterizos más estrictos y la implementación de cláusulas espejo en acuerdos comerciales.
Unión de Uniones hace un llamado al Estado español para impulsar estas reformas dentro de la Unión Europea y mejorar su capacidad de supervisión de las importaciones de países terceros en los puntos de entrada. Estas cuestiones serán llevadas a la atención del Ministerio de Agricultura durante la tractorada que la organización ha convocado en Madrid para el próximo 21 de febrero
En conclusión, Unión de Uniones aboga por un cambio integral en el sistema de precios de entrada de la UE, basado en la transparencia, la eficacia y la equidad. La organización reitera su compromiso con la protección de los agricultores europeos y la promoción de prácticas comerciales justas. La revisión profunda y transparente del EPS es vista como esencial para enfrentar los desafíos actuales y construir un futuro más sólido para el sector agrícola europeo.
Unión de Uniones insiste en la importancia de aumentar la transparencia en la aplicación del EPS para garantizar su efectividad. La falta de claridad en la recopilación y presentación de datos de precios puede afectar la capacidad del sistema para responder a situaciones de crisis. La organización aboga por una revisión exhaustiva del proceso de recopilación de datos y la implementación de controles más rigurosos para asegurar que los precios registrados reflejen con precisión la realidad del mercado, evitando así distorsiones que perjudiquen a los productores
El episodio de las importaciones de tomate de Marruecos sirve como un recordatorio crítico de los desafíos que enfrenta el sistema actual. Unión de Uniones destaca que el caso evidencia la necesidad de reformas que aborden las lagunas en el EPS y garanticen que las medidas de reequilibrio del mercado se desencadenen de manera efectiva en momentos de crisis. La organización busca una solución integral que no solo corrija las deficiencias observadas, sino que también fortalezca la capacidad del sistema para proteger los intereses de los agricultores europeos.
Reforzamiento del sistema ante tensiones en los Precios Internos
La solicitud de Unión de Uniones de reforzar el EPS se centra en la idea de dotar al sistema de herramientas más efectivas para contrarrestar las tensiones en los precios internos. La propuesta de un índice de precios sintético y simple basado en la evolución de los precios intracomunitarios se presenta como una alternativa viable para mejorar la capacidad del sistema de adaptarse a las condiciones cambiantes del mercado, ofreciendo así una mayor protección a los agricultores
Unión de Uniones destaca que las negociaciones comerciales internacionales desempeñan un papel fundamental en la configuración del marco comercial para las frutas y hortalizas. La organización hace un llamado a la Unión Europea para que, en estas negociaciones, defienda los intereses de los agricultores y garantice que las preferencias comerciales concedidas a terceros países sean equitativas y respeten los estándares europeos. La inclusión de cláusulas espejo en acuerdos comerciales se presenta como una medida adicional para nivelar el campo de juego y garantizar condiciones equitativas para todos los productos importados
Unión de Uniones reafirma su compromiso con la defensa de los agricultores europeos y la promoción de un sistema agrícola ético y sostenible. La tractorada convocada para el 21 de febrero en Madrid se presenta como una oportunidad para llevar estas preocupaciones directamente al Ministerio de Agricultura, buscando el compromiso y la acción necesarios para implementar reformas significativas. En última instancia, la organización se mantiene firme en su búsqueda de un sistema de precios de entrada justo, transparente y eficaz que garantice un entorno competitivo equitativo para los productores agrícolas europeos.
