En plena campaña de recolección, el sector del limón en la Comunitat Valenciana enfrenta una de sus peores crisis, con precios en caída libre.
LA UNIÓ de Llauradors i Ramaders ha lanzado un grito de auxilio, criticando duramente la pasividad tanto de la interprofesional Ailimpo como del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), ante una situación que amenaza con desestabilizar no solo a los productores sino a toda la economía regional vinculada al cultivo de limón.
Un Plan de Rescate para el limón Ignorado
La propuesta de LA UNIÓ, que buscaba retirar 50.000 toneladas de limones Fino del mercado mediante una ayuda extraordinaria, ha sido ignorada. Esta medida pretendía aliviar la saturación y mejorar los precios, que han sufrido un descenso superior al 39% desde el inicio de la campaña. La ayuda, calculada en 0,18 euros por kilogramo, representaría una inyección vital de 9,5 millones de euros para el sector, sin embargo, no ha encontrado eco en las instituciones responsables.
La Actuación Esperada de Ailimpo y el Ministerio
La interprofesional Ailimpo, cuya misión incluye la gestión de crisis como la actual, ha mantenido un silencio que ha exacerbado la frustración entre los agricultores. Su capacidad de regular la oferta y asegurar una competencia leal parece haber quedado en papel solamente, en momentos donde su intervención es más necesaria que nunca.
Por otro lado, el Ministerio de Agricultura ha sido acusado de adoptar una postura de indiferencia, sin reconocer la gravedad de la situación ni proponer alternativas para un cultivo esencial para el país.
La Respuesta Insuficiente de la Conselleria
La única reacción ha provenido de la Conselleria de Agricultura de la Generalitat Valenciana, que, aunque consciente del problema, insiste en que la solución debe emanar de Ailimpo y el MAPA, dejando en evidencia la falta de coordinación y urgencia en las respuestas institucionales.
Pérdidas Millonarias y el Fantasma de la Inacción
Las pérdidas estimadas superan los 26 millones de euros para los productores de limón alicantinos, una cifra que refleja no solo el impacto económico directo, sino también el desgaste emocional y financiero de quienes dependen de este cultivo. La falta de acción amenaza con dejar una parte significativa de la cosecha sin recolectar, empeorando aún más la situación.
El Rol de las Importaciones en la Crisis
El aumento en las importaciones de limón desde terceros países ha contribuido significativamente al desplome de los precios y al exceso de oferta en el mercado europeo. Con un incremento del 15,8% en las importaciones durante los primeros cuatro meses de la campaña 2023/24, la competencia desleal se perfila como un factor crítico en esta crisis.
Un Llamado a la Acción: No Hay Tiempo que Perder
Ante este escenario, es imperativo un cambio de estrategia y una acción coordinada entre todas las partes involucradas. La crisis del limón no solo pone en juego la supervivencia de cientos de productores, sino que también amenaza con tener repercusiones a largo plazo en la economía regional y nacional. Es hora de que Ailimpo, el MAPA y la Conselleria de Agricultura asuman su responsabilidad y trabajen juntos para encontrar soluciones inmediatas y efectivas.
