La Comunidad de Madrid analiza cada año más de 95.000 muestras de leche procedentes de las hembras de ganado vacuno, ovino y caprino de la región. Así lo ha podido comprobar el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Carlos Izquierdo, durante su visita al Laboratorio de Control Lechero, ubicado en el Centro de Selección y Reproducción Animal (CENSYRA), que cuenta con un nuevo analizador.
El análisis de estas muestras supone más de 480.000 determinaciones analíticas. Una ingente cantidad de material que, desde el mes de diciembre del año pasado, pasa por un nuevo analizador que ha supuesto una inversión que alcanza los 482.000 euros.
Adscrito al Instituto de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario de la Comunidad (IMIDRA), el Laboratorio de Control Lechero presta a las Asociaciones de Ganaderos el servicio de análisis de la composición de las muestras de leche obtenidas. De esta manera, el analizador muestra más de 480.000 determinaciones de los niveles de grasa, proteínas, acidez, lactosa o azúcares de la leche de las cabañas de ganado vacuno, ovino y caprino madrileñas. Un centro que, tras todo un año de ensayos y validaciones, cumple con los exigentes requisitos para estar acreditado por la Entidad Nacional de Acreditación.
“La elevada inversión que ha supuesto la adquisición de este nuevo analizador redundará en un mejor servicio a los ganaderos de Madrid”, ha explicado Izquierdo. Así, -ha precisado- las explotaciones podrán disponer de información “más adecuada y completa, destinada a ser utilizada en la mejora genética de
sus animales”.
CENTRO TECNOLÓGICO DE PRIMER NIVEL
El CENSYRA está designado como Centro Nacional de Referencia para la Reproducción Animal y como Banco de Germoplasma animal. Todo con el objetivo fundamental de tener una copia de seguridad del material genético que debe conservar cada una de las asociaciones de ganaderos de razas autóctonas de toda España, garantizando así su mantenimiento.
Durante su visita a las instalaciones, el consejero ha recordado que la Comunidad de Madrid ha concedido un total de 3,3 millones de euros en esta legislatura a la agricultura y ganadería ecológicas y a las razas autóctonas: “Este mismo mes hemos autorizado más de 1,3 millones de euros para el mantenimiento de estas razas en peligro de extinción”.
Las ayudas, cofinanciadas por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER), por la Administración General del Estado y por el Gobierno regional permiten no sólo prestar apoyo a los ganaderos, sino poner en marcha programas de conservación y mejora genética para mantener estas razas, generando sementales que puedan garantizar su continuidad.
Se trata, como ha destacado Izquierdo, de “una de las herramientas más importantes para la mejora de la cabaña ganadera, porque facilitan que la mejora genética resulte accesible a todos los ganaderos”. De esta manera, los propietarios de las explotaciones podrán producir más con menos gasto, aumentando su rentabilidad y haciendo del campo una opción de empleo y negocio.
LA GANADERÍA COMO EJE DEL DESARROLLO RURAL
La Comunidad de Madrid continúa así apostando por la actividad ganadera como uno de los ejes de desarrollo rural, fijando la población, facilitando la pervivencia de los oficios tradicionales, contribuyendo a la dinamización de las pequeñas economías y favoreciendo la explotación de terrenos difícilmente utilizables en zonas de montaña.
Solo en la región se contabilizan más de 12.000 profesionales censados que trabajan en las 4.932 explotaciones ganaderas madrileñas, cuya cabaña alcanza aproximadamente los dos millones de animales entre bovino, caprino, ovino, equino, porcino, aviar y colmenar.
