El Consejo Provincial Agrario de Soria, reunido en la mañana de hoy, ha aprobado, por unanimidad de todos sus miembros, solicitar del Gobierno de España la valoración de la provincia de Soria como zona de alta afección por sequía para que el nivel de ayuda al sector agrario sea similar al concedido a otras comunidades autónomas con problemas similares.
Reunido bajo la presidencia de la delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Soria, Yolanda de Gregorio, el Consejo Provincial Agrario, órgano de interlocución entre el sector agrario soriano y la Administración regional, ha renovado sus vocalías como consecuencia del proceso electoral que tuvo lugar en el mes de febrero para evaluar la representatividad de las organización profesionales agrarias (OPAs). Por parte de Asaja, con cuatro vocales, se ha nombrado a Ana Pastor Soria, nueva presidenta provincial; por parte de la Alianza por la Unidad del Campo (Upa-Coag), con dos vocalías, ha tomado posesión Alfredo Cabrerizo Hernández, responsable provincial de Coag, manteniéndose el resto de miembros: Carmelo Gómez Sanz, Alejandro Aguado González y Diego Escalada Molina, por Asaja, y Raúl Ramírez Callejo, por Upa.
El Consejo ha aprobado por unanimidad el informe preceptivo de las ordenanzas que regularán el aprovechamiento de pastos, hierbas y rastrojeras sometidas a ordenación común en la Junta Agraria Local de Fuentecantos, de reciente creación.
Por parte de las OPAs se ha incidido en la necesidad de que la Junta de Castilla y León establezca ayudas directas al sector.
Los miembros del Consejo Agrario se han interesado por la evolución de la tuberculosis bovina en la provincia. Por parte del Servicio Territorial de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural se les ha informado que, con el esfuerzo de todos, se van consiguiendo valores de prevalencia que permitirán a la provincia ser libres en breve, del mismo modo que ya se ha conseguido en Burgos, Valladolid y León. Las Opas han puesto de manifiesto el apoyo para no cejar en el empeño y lograr el estatus sanitario deseado, lo que redundará en una mejora económica de las explotaciones.
En la reunión se ha cuestionado la incidencia de la fauna en los daños a los cultivos, fundamentalmente por ciervos y, en menor medida, por corzos. La delegada territorial ha expuesto las medidas que se están tomando en materia de gestión cinegética para que las poblaciones de hembras de ambas especies estén equilibradas y retornen a cifras que sean compatibles con la agricultura y la ganadería de la zona.
Por parte de UPA se puso de manifiesto la preocupación por los ataques del lobo a la cabaña ganadera. Los daños económicos son elevados para aquellos ganaderos que sufren los ataques, abogando por una vuelta a la gestión que se llevaba antes de las modificaciones legales introducidas por el Gobierno de España.
Asaja ha manifestado su preocupación por las consecuencias que para la economía de los agricultores de Soria puede suponer la implantación de medidas restrictivas para las labores de cosecha y empacado que comenzarán en breves días, por el riesgo de incendios que suponen. La delegada ha informado sobre la próxima publicación de normativa que regule estos aspectos, normativa que va a ser consensuada con las Opas. Agradeció que el sector agrario sea el primero en comprometerse en la lucha contra el fuego, en especial todos los agricultores de la provincia.