Un equipo internacional de investigadores, incluido en el mismo Fernando T. Maestre de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC),reunió un atlas global de bacterias del suelo. El estudio, publicado en Science , identifica unas quinientas especies de bacterias dominantes que viven en suelos de todo el mundo. Las conclusiones, basadas en investigaciones financiadas por la UE, podrían abrir nuevos caminos para mejorar la fertilidad del suelo y aumentar la producción agrícola.
Las bacterias del suelo forman la gran mayoría de la biomasa viva de la tierra y juegan un papel clave en las vidas de los seres vivos. Controlan los procesos centrales para el desarrollo de los ecosistemas, como la fertilidad del suelo, que es esencial para la producción de alimentos. También influyen en el almacenamiento de carbono, con un impacto directo sobre el cambio climático. Una pizca de tierra contiene miles de especies y millones de células bacterianas, y el conocimiento sobre estos organismos todavía es escaso.
» La mayoría de las bacterias del suelo aún no se han descrito, no coinciden con los registros genéticos existentes y nunca se han cultivado en el laboratorio » , explica el profesor Fernando T. Maestre, que ha recibido subvenciones de la UE a través del Consejo Europeo de Investigación para su proyectos BIOCOM y BIODESERT . » En gran parte, estos resultados han sido posibles gracias al apoyo inicial del ERC. Nos permitió creer en nuestra intuición, pensar en grande y lanzar una encuesta de campo global que ha sido fundamental para llevar a cabo este trabajo, que es un importante paso adelante en nuestra comprensión de las comunidades bacterianas que viven en los suelos del mundo «.
El nuevo estudio ayuda a comprender mejor la identidad de estas bacterias y, lo que es más importante, su papel en la funcionalidad de los ecosistemas. Los resultados de la investigación muestran que el 2% de las especies globales de bacterias, unas 500 especies, comprenden aproximadamente la mitad de las poblaciones bacterianas en cualquier suelo del planeta. Algunos de estos microbios parecen ser extremadamente dominantes y comunes en los suelos. Al estudiar su funcionamiento, la investigación futura podría arrojar luz sobre las comunidades microbianas de los suelos agrícolas, ayudando a preservar su salud y aumentar la productividad de los alimentos.