Las organizaciones agrarias ASAJA y La Alianza UPA – COAG han coincidido en el día de hoy en valorar los datos de la cosecha, los primeros la han cuantificado en 4,6 millones de toneladas mientras los segundos la elevaban ligeramente hasta los 4,8, destacando ambos en que se trata de una cosecha «mala» o «muy mala», un 25 por ciento peor que la media de los últimos 10 años o un 35 por ciento inferior a la de la campaña pasada.
Incluso desde la UPA – COAG se llegan a cuantificar las pérdidas que tendrán qie soportar los agricultores de Castilla y León que podrían alcanzar los 437,5 millones de euros según sus estimaciones.
Desde ASAJA señalan que esta mala cosecha es fruto de un largo proceso que se inicia con un un invierno muy lluvioso que trastocó desde el inicio el cereal, con encharcamientos y mala germinación de la semilla, pero que ha tenido su contrapunto en la ausencia casi total de lluvias en los meses claves para el secano, abril y mayo, que terminó por agostar el cereal antes de tiempo y todo rematado con la intensa proliferación de hongos, principalmente roya y septoria, a lo que las altas temperaturas de los últimos días tampoco ayudan.
Esta Organización recuerda a los agricultores la vital importancia de contar con un seguro que garantice una renta mínima a la explotación y que hasta el próximo 15 de junio está abierto el plazo para asegurar la cosecha de cereal de invierno, leguminosas y oleaginosas frente a los riesgos de pedrisco, incendio y otros, a través del Seguro para Cultivos Herbáceos Extensivos.
Por su parte UPA – COAG asegura en su comunicado de prensa que con la entrada de las cosechadoras a las primeras parcelas en provincias como Salamanca, Valladolid, Zamora o Ávila, no sólo se han confirmado las previsiones de mala cosecha, sino que incluso han empeorado.
Además de la bajísima producción en las primeras parcelas que se han cosechado el peso específico del grano es muy bajo, por lo que la producción total de cereal en esta comunidad autónoma va a ser ciertamente «baja» Incluso en algunas zonas de Castilla y León la reducción en la producción va a llegar al 80 % respecto a lo cosechado en el 2013
