La producción de aceite de oliva en Extremadura experimenta un resurgimiento notable para la campaña 2023/24.
Según las estimaciones de la Sectorial de Aceite de Oliva de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, se espera alcanzar 65.000 toneladas en la región, lo que representa un significativo incremento del 79% en comparación con la campaña anterior.
Contexto Histórico
La campaña pasada fue particularmente desafiante para los productores de aceite de oliva en Extremadura. Con una producción de poco más de 36.300 toneladas, la región enfrentó adversidades climáticas como la sequía y altas temperaturas, factores que impactaron negativamente en los momentos cruciales del desarrollo del fruto.
Declaraciones Clave y Análisis de la Producción
Fabián Gordillo, presidente de la Sectorial de Aceite de Oliva de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, subraya la importancia de este incremento. «Es una cifra que supera la producción de la campaña pasada…». Con este resurgimiento, Extremadura se posiciona como la sexta productora a nivel nacional.
Panorama Nacional del aceite de oliva
El incremento en la producción no se limita a Extremadura. A nivel nacional, se espera un aumento generalizado. Cooperativas Agro-alimentarias de España proyecta una producción nacional de aproximadamente 755.000 toneladas para la campaña 2023/24, lo que equivale a un incremento del 13,7% respecto al año anterior.
Impacto en los Mercados Internacionales
La campaña anterior, marcada por un descenso en la producción, tuvo un impacto considerable en los mercados internacionales. La escasez de aceite de oliva derivó en un aumento notable en los precios. Sin embargo, este incremento en los precios no se tradujo necesariamente en beneficios para los agricultores y cooperativas, quienes enfrentaron costos de producción elevados.
Desafíos y Oportunidades para Agricultores y Cooperativas
A pesar del panorama alentador en términos de volumen de producción, Gordillo señala que el aumento en los precios en origen no ha beneficiado directamente a los productores. «Esto no ha beneficiado a agricultores y cooperativas…», comenta, haciendo referencia a los desafíos asociados con los costos de producción en campo y almazara.
Conclusión La proyección para la campaña 2023/24 en Extremadura representa una oportunidad para revitalizar el sector del aceite de oliva en la región y a nivel nacional. A pesar de los desafíos económicos y climáticos, el incremento en la producción es un signo positivo para el futuro del sector. Sin embargo, es crucial abordar los problemas de costos y beneficios para garantizar un desarrollo sostenible y equitativo para agricultores y cooperativas en el dinámico mercado del aceite de oliva.
