En una operación conjunta entre la Guardia Civil y la Consejería de Salud de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia (CARM), se ha desarticulado una red dedicada a la importación y comercialización ilegal de aceite de oliva. Dos individuos han sido detenidos por presunta implicación en este entramado delictivo, que involucra la distribución de aceite con etiquetado falsificado y sin los debidos registros sanitarios y de trazabilidad.
Colaboración ciudadana: el inicio de la investigación de la Guardia Civil
La investigación se inició en marzo, cuando la Guardia Civil recibió información de la posible utilización de etiquetas falsificadas en la venta de aceite de oliva en la comarca del Guadalentín. Gracias a la colaboración ciudadana, se pudo avanzar en el esclarecimiento de estos hechos.
Detención y decomiso de mercancía ilegal
Tras intensas pesquisas, los agentes del SEPRONA lograron identificar a los responsables y ubicar tanto un comercio en Alhama de Murcia como una vivienda en Librilla, donde se almacenaba la mercancía ilegal. En el comercio, se encontraron garrafas de aceite de oliva con etiquetado falsificado, mientras que en la vivienda se incautaron grandes cantidades de producto sin etiquetado ni documentación que respaldara su origen y trazabilidad.
Magnitud del decomiso
En total, se han inmovilizado 400 litros de aceite de oliva de origen portugués, que carecían de los requisitos legales para su comercialización en España. Estas acciones ilegales no solo representan un riesgo para la salud pública, sino que también vulneran las normativas vigentes en materia de seguridad alimentaria y nutrición.
Implicaciones legales
Los detenidos enfrentan cargos por delito contra la salud pública y fraude alimentario, delitos que conllevan graves consecuencias legales. La comercialización de productos alimenticios sin los debidos registros sanitarios y de trazabilidad pone en riesgo la salud de los consumidores y socava la confianza en el sistema alimentario.
Compromiso institucional
La colaboración entre la Guardia Civil y la Consejería de Salud de la CARM demuestra el compromiso de las autoridades en la lucha contra el fraude alimentario y la protección de la salud pública. Esta sinergia entre instituciones es fundamental para garantizar la seguridad y calidad de los productos que llegan a los consumidores.
Advertencia a los consumidores
Ante este tipo de prácticas fraudulentas, se hace un llamamiento, por parte de la Guardia Civil, a la ciudadanía a ser consciente de la procedencia y calidad de los productos que adquieren. Es importante verificar que los alimentos cuenten con los debidos sellos de calidad y registros sanitarios, así como exigir la documentación de trazabilidad que respalde su origen y proceso de producción.
Conclusión
La detención de estas personas y el decomiso de la mercancía ilegal representan un importante golpe al comercio ilícito de alimentos. Sin embargo, es necesario continuar con la vigilancia y el control para erradicar por completo estas prácticas que ponen en riesgo la salud pública y la confianza de los consumidores. La cooperación entre las autoridades y la participación ciudadana son fundamentales en esta lucha constante por garantizar la seguridad alimentaria.
