Desde el pasado 19 de abril, la comunidad ganadera de Castilla y León ha enfrentado una serie de obstáculos y crisis en el programa de vacunación contra la Lengua Azul, una enfermedad viral que afecta principalmente al ganado. El fin del periodo estacionalmente libre de la enfermedad marcó el inicio de una serie de complicaciones logísticas y de suministro que han obstaculizado la distribución normal de las vacunas necesarias.
Detalles del Desabasto y Medidas Excepcionales ante la crisis
A pesar de que inicialmente se describió como un problema menor de logística, la situación ha escalado a tal punto que las autoridades han tenido que suspender varias vacunaciones y revacunaciones planificadas. Esta interrupción afecta directamente a las explotaciones ganaderas que requieren administrar dosis anuales o que necesitan vacunar y revacunar terneros para diversas actividades, como el envío a cebaderos o el sacrificio, muchas de estas acciones coordinadas con los saneamientos regulares.
La Asociación de Ganaderos «19 de abril» ha denunciado esta situación desde hace tres semanas, solicitando medidas excepcionales ante esta crisis que finalmente han sido autorizadas. La Dirección General de Ganadería ha admitido los problemas y ha informado que el laboratorio encargado de suministrar las vacunas no podrá cubrir la demanda en las zonas de restricción de Castilla y León en las próximas semanas debido a problemas logísticos. Mientras tanto, se ha flexibilizado el movimiento de animales dentro de la región, permitiendo su traslado sin necesidad de vacunación o pruebas PCR bajo ciertos requisitos, como la desinsectación previa del animal y del transporte.
Mientras el suministro de vacuna no esté restablecido, permitirán el movimiento de animales dentro de Castilla y León, sin necesidad de vacunar ni hacer PCR, siendo los requisitos: para los movimientos con destino vida la desinsectación previa del animal y del transporte y para lo que tiene el fin del sacrificio: desinsectación previa transporte.
Impacto Económico y Llamado a la Acción
Este desabasto, esta crisis ganadera, no solo supone un riesgo sanitario sino también un impacto económico significativo para los ganaderos, quienes dependen de la regularidad y efectividad de estas campañas de vacunación para mantener sus operaciones libres de enfermedades y económicamente viables. Además, la 19 de abril, la asociación hizo un llamado a la Consejería para que no se retrase más la aprobación de ayudas relacionadas con la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), especialmente después de que las Cortes de Castilla y León destacaran al campo como sector estratégico en los presupuestos aprobados recientemente.
Datos de Prevalencia y Contexto Regional
En un contexto más amplio, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha revelado recientemente las prevalencias de la tuberculosis bovina en la región, con la provincia de Salamanca registrando un 4.12% de prevalencia. Este dato subraya la importancia crítica de mantener programas de vacunación y control de enfermedades efectivos y bien gestionados para proteger no solo la salud animal sino también la economía rural.
Conclusión: Necesidad de Soluciones a Largo Plazo
La crisis actual subraya la necesidad de una planificación más robusta y de soluciones a largo plazo que aseguren la disponibilidad continua de vacunas y otros insumos críticos para la salud animal. La gestión efectiva de estas crisis sanitarias es esencial para la sostenibilidad de la agricultura y la ganadería en regiones como Castilla y León, donde el campo es un pilar fundamental de la economía local.
