«Sin precedentes», así ha calificado la cosecha mundial 2024/2025 el Consejo Internacional de Cereales en el informe de previsiones de diciembre de 2024.
Según el Internacional Grain Council, la recogida en esa campaña alcanzará los 2.332 millones de toneladas, superando en un 1,2% a la previa cuando llegaron hasta los almacenes de los agricultores 2.310 millones de cereales.
En una línea similar se va a mover el consumo mundial de estos productos que se situará, según estas previsiones del Consejo Internacional de Cereales, en los 2.331 millones de toneladas, cifra que es un 1,1% superior a la de la 23/24 cuando se cuantificó este apartado en los 2.306 millones.
Ese ascenso del consumo mundial de cereales se debe, en gran medida, al aumento de las partidas destinadas a la producción de pienso que alcanza niveles históricos al situarse en los 1.056 millones de tonelada en la campaña 24/25, cantidad que es un 1% más que en la previa.
A la alimentación humana se dedican 765 millones de toneladas (+0,7%) mientras a la actividad industrial se destinan 376 millones de toneladas (+0,9% sobre la campaña 23/24)
Trigo, ascenso de la cosecha mundial de cereales
El IGC, en su documento de previsiones del mes de marzo de 2024, ha elevado la cosecha mundial de cereales en la
2024/2025 hasta los 799 millones de toneladas. Esa estadística representa un ascenso del 1,1% sobre la recogida anterior cuando se contabilizaron 789 millones.
El consumo de este cereal, en el mercado mundial, se va a mantener estable pues se anuncia un gasto de 804 millones frente a los 803 de la 23/24.
Suave repunte del maíz
La cosecha mundial del maíz en la campaña 24/25 se situará, según los cálculos realizados por el Consejo Internacional de Cereales, en los 1.233 millones de toneladas, un 0,5% más que en la 23/24 cuando fueron 1.227 millones.
El consumo se mantiene estable en los 1.230 millones de toneladas.
Crece un 5,8% la producción de soja en la 24/25
La soja es la que más eleva las producciones de cara a la campaña 24/25. Así, el IGC estima la cosecha mundial de esta oleaginosa en los 413 millones de toneladas, dato que supone un incremento del 5,8% sobre la anterior cuando esa estadística fue de 390 millones.
Por el contrario, el consumo mundial de la soja, en la 24/25, vivirá una significativa reducción del 5,2% al pasar de los 404 millones a los 383 millones.
Las previsiones del Consejo Internacional de Cereales (CIC) juegan un papel crucial en el mercado global de alimentos, afectando a una amplia gama de stakeholders que incluye desde agricultores hasta gobiernos y consumidores. La importancia de estas previsiones se deriva de su capacidad para influir en las decisiones de política, planificación agrícola, y estrategias de inversión a nivel mundial. Al proporcionar análisis y proyecciones sobre la producción, el consumo, el comercio, y las existencias de cereales y oleaginosas, el CIC contribuye significativamente a la estabilización de los mercados alimentarios globales y a la seguridad alimentaria.
Influencia en la Política y Planificación Agrícola
Las previsiones del CIC ofrecen una base sólida para la formulación de políticas agrícolas y económicas. Los gobiernos y organismos reguladores las utilizan para ajustar sus políticas de importación y exportación, establecer aranceles y cuotas, y diseñar programas de apoyo a los agricultores. Estas decisiones tienen un impacto directo en la sostenibilidad de la agricultura local y la seguridad alimentaria de cada país. Por ejemplo, anticipando un año de baja producción de trigo a nivel mundial, un país puede decidir aumentar sus reservas nacionales o incentivar la producción local para evitar futuros déficits.
Gestión de Riesgos y Estrategias de Inversión
Para los agricultores y productores, las previsiones del CIC son una herramienta esencial para la gestión de riesgos y la planificación de cultivos. Al ajustar sus estrategias de siembra y venta basándose en las proyecciones de demanda y precios, pueden maximizar sus beneficios y reducir las pérdidas. Los inversores y empresas del sector agroalimentario también dependen de estos informes para tomar decisiones informadas sobre dónde y cuándo invertir.
Estabilización de los Mercados y Precios
Las fluctuaciones en la producción y precios de los cereales pueden tener consecuencias significativas en la economía global, afectando todo, desde los costos de los alimentos hasta la inflación general. Las previsiones del CIC ayudan a estabilizar estos mercados proporcionando datos confiables que permiten a los participantes del mercado anticipar cambios y ajustar sus operaciones en consecuencia. Esto es especialmente importante en situaciones de crisis, donde la información precisa y oportuna puede ayudar a prevenir la especulación desenfrenada y los picos de precios.
Apoyo a la Seguridad Alimentaria Global
Finalmente, pero no menos importante, las previsiones del CIC son fundamentales para la seguridad alimentaria global. Al monitorear las tendencias en la producción y consumo de cereales, el Consejo puede identificar posibles déficits o excedentes y alertar a la comunidad internacional. Esto permite la implementación de medidas preventivas, como la liberación de reservas estratégicas de cereales o el lanzamiento de programas de ayuda alimentaria en regiones vulnerables.
En conclusión, las previsiones del Consejo Internacional de Cereales son una piedra angular en el mantenimiento de la estabilidad y sostenibilidad del sistema alimentario mundial. Al proporcionar datos fiables y proyecciones precisas, el CIC permite una mejor planificación y gestión de los recursos agrícolas, contribuyendo así a una economía global más resiliente y a una mejora en la seguridad alimentaria de poblaciones en todo el mundo.
