Cooperativas Agro-alimentarias de España ha realizado una primera valoración sobre la cosecha de cereales de 23,4 millones de toneladas, este dato se sitúa más de un 25% por encima del dato final de la campaña anterior, cuando se recogieron 18,5 millones, o del promedio del último quinquenio que se sitúa en los 19,3 millones de toneladas.
[[{«fid»:»27638″,»view_mode»:»media_original»,»type»:»media»,»attributes»:{«height»:217,»width»:515,»style»:»width: 515px; height: 217px; border-width: 6px; border-style: solid; margin: 6px; float: left;»,»class»:»media-element file-media-original»}}]]Esa cifra total, aunque se trata de una primera estimación dado que las lluvias y las bajas temperaturas están retrasando el ciclo de cereal en todas las Comunidades Autónomas, es muy similar a la alcanzada en 2013 cuando se llegó a los 24,1 millones en en 2000 cuando fueron 23,7 millones de toneladas los recogidos de cereal en los campos españoles.
En cuanto a la superficie indicar que se produce una reducción de 1,27% al bajar desde las 6.067.643 hectáreas a las 5.990.698 actuales.
Destaca la fuerte caída de superficie en maíz, un 20,41% con respecto a 2015, al estar dedicadas a este cultivo en la actualidad 308.280 has frente a las 387.325 de la cosecha previa lo que provocará una disminución de más del 20% en la producción hasta situarse en los 3,1 millones de toneladas.
Castilla y León se mantendrá como líder en cuanto a producción de este grano con aproximadamente unas 800.000 toneladas, aunque Cooperativas Agroalimentarias estima una reducción del 35,8%.
La cebada presenta una ligera recuperación de superficie del 1,42% respecto de 2015 hasta alcanzar los 2,6 millones de hectáreas que conllevará un aumento en la producción del 41.56% y una mejora del rendimiento respecto de 2015 al pasar de 2,63 t/ha. a 3,67 t/ha.
Aquí también Castilla y León es la que lidera el apartado de producción con 3,2 millones de toneladas, dato que supone un aumento del 45% frente a la cifra de la cosecha previa.
En trigo blando pese a tener una caída de superficie del 2,38% hasta reducirse a los 1,7 millones de hectáeras, se prevé un aumento en la producción del 38,43% hasta alcanzar los 7,2 millones de toneladas como consecuencia de una mejoría sustancial de los rendimientos.
De las parcelas dedicadas a este cultivo en la región castellanoleonesa se van a obtener 3,9 millones de toneladas, al ser la principal región productora.
Mientras que el trigo duro recupera un 14% de superficie respecto a 2015, subes hasta las 404.000 hectáreas, con lo que aumentará su producción un 27,01%, hasta llegar a los 1,1 millones de toneladas, buena parte de los cuales se concentran en Andalucía de donde van a salr 756.000 toneladas de las 270.000 hectáreas que se dedican a este cultivo