Los Premios Editorial Agrícola 2017 han reconocido este martes 16 de enero de 2018 en Madrid a dos empresas de Castilla y León. Una, veterana y de contrastada solvencia como es la cooperativa zamorana Cobadú, con más de tres décadas de existencia. Otra, innovadora y con un gran futuro, Aleia Roses, que cultiva en Soria una de las rosas de mayor calidad del Mundo.
Unos premios que se han entregado en el marco del Foro Innagrotable, encuentro que ha puesto en valor los casos de éxito de los premiados con el objetivo de inspirar a entidades y empresas que trabajan por y para el sector agroalimentario.
Éxito como el de Cobadú, cooperativa de Zamora con 35 años de experiencia, que ha destacado, según el jurado, por “el fuerte compromiso con sector agropecuario, especialmente con los agricultores y ganaderos que forman parte de la cooperativa”. Durante el foro, Rafael Sánchez, gerente de Cobadú, se ha enorgullecido por no haber “expulsado nunca a ningún socio”, a la vez que ha señalado que una de las claves del éxito ha sido “ser una cooperativa de primer grado porque ha permitido tener un distinto ritmo de integración a todos nuestros socios”.
La mejor rosa del Mundo es de Soria
Aleia Roses es una iniciativa de floricultura que arrancó en septiembre de 2015 en la localidad de Garray donde en menos de tres años ha logrado crear más de 360 puestos de empleo directos y una producción diaria de 120.000 rosas rojas de la variedad ‘Red Naomil!’ en un invernadero de 14 hectáreas, uno de los más grandes del Mundo y donde se cultiva una flor de gran calidad.
“Desde agosto de 2016, producimos al 100%. Casi el 85% va a Holanda porque es el gran distribuidor mundial de flor corta y planta ornamental”, ha explica Sergio Moreno, director de operaciones de Aleia Roses, quien ha señalado el principal motivo de por qué en Soria: “Hay una condiciones climáticas ideales para producir de forma continua rosas de alta calidad, ya que, incluso en varano, las noches son frías. El calor rebaja la calidad de la flor”.
Las rosas rojas sorianas de Garray se caracterizan por “su belleza y por la gran cantidad de pétalos ya que producimos tamaños de longitud de tallo de entre 50 y 90 centímetros”, ha detallado Moreno, quien forma parte de un proyecto al que el jurado ha reconocdio su “innovación agrícola allí donde hay dificultades de cultivo más allá del cereal”, además de “fijar población en el entorno rural”.
Otro caso de éxito galardonado por Editorial Agrícola ha sido Verdifresh, empresa especializada en el procesado y distribución de hortaliza, y que cuenta con una instalación en Aranda de Duero (Burgos). Entre los méritos para su galardón destaca su innovación desde el producto hasta el consumidor. “A través de una colaboración estrecha con los agricultores, podemos innovar juntos”, ha afirmado Victoria Gilabert, responsable comercial de la empresa valenciana.
El cuarto premio ha recaído en Kerixara, productora vasca de queso con la D.O.P. Idiazabal y que se basa en el uso integral de la colza como alternativa sostenible para la producción de queso. “La clave está en la economía circular, que todo sea de casa”, ha señalado Félix Ajuria, pastor, biólogo y uno de los dueños de la quesería.
