El 8 de julio de 2024 marca un hito significativo para la gastronomía española. El Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) ha publicado el reglamento que aprueba la inscripción del «Cochinillo de Segovia» en el registro de la Unión Europea de Denominaciones de Origen Protegidas e Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP). Este logro no solo otorga una protección legal al nombre del «Cochinillo de Segovia», sino que también resalta la calidad superior y el origen auténtico de este producto tradicional.
El Proceso de Obtención de la IGP
La obtención de la IGP para el «Cochinillo de Segovia» no ha sido un camino sencillo ni rápido. El proceso comenzó el 6 de octubre de 2022 con la publicación de la solicitud en el Boletín Oficial del Estado (BOE) por parte de la Dirección General del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León. Desde entonces, diversas etapas de evaluación y verificación han sido necesarias para asegurar que el producto cumple con los estrictos estándares requeridos para obtener este prestigioso reconocimiento.
Características del «Cochinillo de Segovia»
El «Cochinillo de Segovia» es conocido por su carne tierna y su sabor distintivo. Este cochinillo es alimentado exclusivamente con leche materna, lo que le confiere unas características únicas. Sus canales de carne rosada y firme son un sello de calidad que distingue a este producto en el mercado. La zona geográfica de producción abarca toda la provincia de Segovia y la comarca de La Moraña en Ávila, donde se realiza el nacimiento, cría, sacrificio y despiece de los animales. Este control integral garantiza la frescura y la calidad del producto final.
Importancia de la IGP en la Economía y Cultura Local
El reconocimiento de la IGP «Cochinillo de Segovia» subraya la importancia de las figuras de calidad diferenciadas en la valorización de los alimentos. Estas certificaciones no solo protegen el producto, sino que también destacan su origen y autenticidad, ofreciendo a los consumidores una garantía de calidad superior. El etiquetado del «Cochinillo de Segovia» incluirá el logotipo de la denominación, el símbolo de la Unión Europea, la fecha de sacrificio y el número de identificación, asegurando así la trazabilidad y autenticidad del producto.
Este logro no solo impulsa la reputación del «Cochinillo de Segovia», sino que también fortalece la economía local y preserva las tradiciones culinarias de la región. La comercialización de productos que deben su especificidad al medio geográfico en el que se producen es crucial para el desarrollo y la sostenibilidad de las zonas rurales. Las indicaciones de calidad contribuyen a mejorar los ingresos de los agricultores y a fijar población, al tratarse de una actividad que no se deslocaliza.
Marco Legal y Normativo
El Reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo establece las normativas para las Denominaciones de Origen Protegidas (DOP), las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP), las Especialidades Tradicionales Garantizadas (ETG) y los Términos de Calidad Facultativos. Este marco legal es esencial para garantizar que los productos que obtienen estas certificaciones cumplen con los estándares de calidad y origen que se les atribuyen.
Estrategia «Alimentos de España»
Las figuras de calidad diferenciada, como la IGP «Cochinillo de Segovia», son clave para promover la imagen de España y constituyen uno de los pilares fundamentales de la estrategia «Alimentos de España». Esta estrategia busca destacar la diversidad y calidad de los productos alimentarios españoles en los mercados nacionales e internacionales, fortaleciendo la posición de España como un referente de excelencia gastronómica.
Futuro del «Cochinillo de Segovia»
Con la obtención de la IGP, el «Cochinillo de Segovia» no solo asegura su protección y reconocimiento a nivel europeo, sino que también se posiciona para un futuro prometedor. Este reconocimiento permitirá a los productores acceder a nuevos mercados y aumentar su competitividad. Además, el apoyo institucional y las políticas de calidad diferenciada seguirán impulsando el desarrollo de la región y la sostenibilidad de sus prácticas agrícolas y ganaderas.
En conclusión, la inscripción del «Cochinillo de Segovia» en el registro de la Unión Europea de Denominaciones de Origen Protegidas e Indicaciones Geográficas Protegidas es un logro significativo que resalta la calidad, autenticidad y tradición de este producto emblemático. Este reconocimiento no solo beneficia a los productores locales, sino que también ofrece a los consumidores la garantía de disfrutar de un producto de excelencia, fiel a sus raíces y métodos de producción tradicionales.