Las movilizaciones de los agricultores catalanes ayer, 28 de julio, ante varios supermercados en Lleida, son la respuesta a las malas prácticas de la gran distribución alimentaria y la crisis de precios que, como consecuencia, se han instalado en el sector de la fruta dulce.
La Unio de Pagesos asegura que los grandes distribuidores sacan provecho de una situación ventajosa dentro del mercado europeo para imponer condiciones de venta desiguales y ejercer una competencia desleal que afecta a sus proveedores. En estos momentos, los agricultores venden productos agrarios de calidad a un precio de mercado situado debajo por debajo de su coste real, con una diferencia del 700% respecto del valor de origen.
Las autoridades competentes catalana, estatal y europea permiten, por omisión, el desarrollo anómalo y desigual del mercado de la fruta dulce. De esta situación se resienten numerosas explotaciones y familias, responsables de un sector que es uno de los principales motores de la producción en Cataluña.
Unió de Pagesos exige al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapam), por tanto, que active de manera urgente el mecanismo extraordinario de retirada de melocotones, nectarinas, melocotones planos y nectarinas planas para la distribución gratuita para la vía de la transformación.
