En los tiempos que corren, cada vez son menos las personas que se dedican a vivir del campo. Desgraciadamente cada vez nos asaltan más titulares en los medios de comunicación hablando del abandono de las zonas rurales, y por ende, de las tierras de labor.
No estamos en este caso. Víctor y su hermano Álvaro llevan en este negocio prácticamente desde que tenían edad para trabajar. Su abuelo, y después su padre, han sido agricultores en Santa Marta del Cerro, un pequeño pueblo del nordeste segoviano que apenas llega a los cuarenta habitantes. Quizás por tradición, por la calidad de vida en el medio rural o porque realmente les gusta lo que hacen, estos dos jóvenes decidieron seguir con el negocio familiar y apostar por ello, en una época en la que la mayoría deciden emigrar a las grandes ciudades por falta de oportunidades laborales y escasez de servicios.
Víctor y Álvaro son los propietarios de una granja de cría de conejos que comenzaron a construir en el año 2007 y que han ampliado al doble recientemente, en plena pandemia, con las dificultades que esto supuso en aquella época en la que la incertidumbre era máxima a todos los niveles. La verdad es que la ampliación ya estaba en mente; fue una locura, pero ya habían comenzado las obras y había que seguir. Recuerdo que los obreros venían de Zamora, y necesitaban un salvoconducto para venir a trabajar. Algunos fines de semana incluso se quedaban a dormir aquí, dice Víctor, que nos recibe en la oficina en la que pasa muchas horas haciendo papeles.
Eutiquiano, su progenitor, decidió diversificar el negocio que llevaba y apostó por la cría de conejos allá por el año 1985, dejando la nave de cerdos pero manteniendo la actividad agrícola. En la comarca Nordeste de Segovia la cría de conejos no es muy habitual: apenas hay alguna granja en la zona de San Pedro de Gaíllos y Fuenterrebollo, pero no son tan grandes como nosotros, afirma Víctor. Date cuenta de que aparte de esta nave que hemos hecho nosotros llevamos muchos años trabajando con mi padre, primero en la granja que construyó dentro del pueblo y que cerró en el año 2006 para levantar una nueva, con más comodidades y nueva tecnología, porque de lo que se trata es de facilitar el trabajo. Nosotros pasamos muchas horas en la granja, pero procuramos tener tiempo libre para hacer lo que nos gusta o irnos de vacaciones. En la granja, salvo que haya que cargar conejos o estar de guardia, los trabajadores no se van más tarde de las 3.
Los conejos que crían están destinados al consumo de carne, que llega a varias zonas de España y parte del extranjero. Los cebos (así se llaman a los conejos de cría) van directamente a un matadero en Navarra a los sesenta y cinco días de vida aproximadamente. Un total de veinte mil cabezas salen solo de su granja (sin contar la que tienen con su padre) cada seis semanas. La limpieza es básica en este trabajo, tanto de cara al consumidor como al bienestar de los propios animales, y una vez se llevan las crías al matadero la sala se desinfecta concienzudamente siguiendo todas las normas sanitarias. Además, como estos hermanos nos dicen, las jaulas ya vienen muy preparadas y las tareas de limpieza es desinfección son cada vez más sencillas.
Víctor y Álvaro son una pareja de hermanos caracterizada por su carácter emprendedor: no en vano, además de la cría de conejos, tienen una empresa de servicios agrícolas a terceros, que iniciaron cuando decidieron llevan las riendas de su propio negocio, y que da servicio a buena parte de pueblos de la provincia de Segovia y fuera de ella. Campo de San Pedro, Carabias o Moral de Hornuez, son solo algunos ejemplos de localidades a las que se desplazan para sembrar, cosechar o realizar cualquier tipo de tarea. Llegan, incluso, hasta la provincia de Burgos.
Un negocio familiar que además de estos dos hermanos y su padre, da trabajo a otras cuatro personas. Qué duda cabe de que en el medio rural hay opciones de trabajo… eso sí, aquí nadie regala nada, como ocurre en todos lados. Y si no, que se lo pregunten a estos chicos.
Hnos. Benito Agropecuaria, S.L.
C/ Los Villares, 1
40310 – Santa Marta del Cerro (Segovia)
Tels: 687 511 139 / 605 602 403
