La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) ha instado hoy, 21 de abril, a suspender el juicio, que se celebrará los próximos días 27 y 29 de abril, contra nueve representantes de ganaderos de León, Soria, Valladolid y Ávila que protagonizaron un encierro en 2008 en la sede de la Federación de Industrias Lácteas (Fenil), en Madrid, por considerar que es «ilógico y desproporcionado».
Así lo ha explicado en León el coordinador general de UCCL, Jesús Manuel González, que ha manifestado que los nueve representantes sindicales, entre los que él mismo se encuentra, están acusados de allanamiento de morada, coacciones e injurias. González ha asegurado que durante el encierro «en ningún momento hubo situaciones de violencia» y que el objetivo de los sindicatos era reunirse con el presidente de Fenil, no llevar a cabo una protesta, pero que obtuvieron «una negativa rotunda». En este sentido, ha justificado que el encierro se llevó a cabo «no para coaccionar ni presionar», sino para «llamar la atención mediáticamente de la situación dramática de los ganaderos de España, y en especial de Castilla y León».
Por estas razones, UCCL ha instado a Fenil a que «retire la denuncia» y que reconozca «que todo ha sido un error» porque considera que «jamás debería haber denunciado» estos hechos. La protesta estuvo motivada, ha agregado González, por la negativa de negociar de la Fenil ante la situación de «ruina» de los productores de leche de la Comunidad debido a que se pagaba la leche «muy por debajo del coste de producción» porque se estaban «pactando los precios».
