La Junta de Castilla y León, a través de su Viceconsejería de Política Agraria Comunitaria y Desarrollo Rural, ha implementado, para frenar la sobrepoblación de topillos, una serie de medidas de flexibilidad en dos prácticas clave de los ecorregímenes de la Política Agraria Común (PAC). Estas medidas buscan controlar eficazmente la creciente población de un roedor que ha causado estragos en los campos de cultivo de la región.
Autorización del Laboreo Vertical en la Siembra Directa
Una de las principales modificaciones anunciadas es la autorización del laboreo vertical en la práctica de siembra directa. Esta técnica, que no implica la inversión de la tierra, ha sido identificada como una herramienta clave en la lucha contra el topillo campesino, especialmente en aquellas parcelas donde se ha detectado una mayor presencia del roedor.
El laboreo vertical permitirá el uso de maquinaria agrícola como el cultivador, el chisel o la grada de discos pequeños, herramientas que contribuirán a la destrucción mecánica de huras y galerías sin alterar la estructura del suelo. Esto no solo ayuda a eliminar refugios para los topillos, sino que también mantiene el rastrojo sobre la superficie, garantizando que el suelo esté cubierto durante todo el año, lo que es fundamental para la preservación de la calidad del terreno.
Recolección Anticipada en Espacios de Biodiversidad
Otra de las modificaciones significativas es la autorización para la recolección anticipada en las superficies de cereal no cosechado dentro de los espacios de biodiversidad. Hasta ahora, los agricultores estaban obligados a esperar hasta el 1 de septiembre para realizar esta tarea, lo que proporcionaba al topillo campesino un entorno ideal para refugiarse y multiplicarse.
Con la nueva resolución, los agricultores podrán proceder de inmediato a la recolección, retirando las pacas y cordones de paja para evitar que los roedores encuentren protección. Esta medida no solo ayuda a reducir la población de topillos, sino que también protege los cultivos de futuros daños.
Evaluación de la Situación en las Comarcas Afectadas
La Junta de Castilla y León ha estado monitoreando de cerca la situación del topillo campesino en toda la comunidad. Las evaluaciones extraordinarias realizadas durante la primavera de 2023 revelaron un repunte en la población de topillos en diversas comarcas. Las zonas más afectadas incluyen:
- Ávila: Comarcas de Arévalo-Madrigal y Ávila.
- Burgos: Arlanza, Bureba-Ebro y Pisuerga.
- León: Esla-Campos y Sahagún.
- Palencia: Boedo-Ojeda, Campos y El Cerrato.
- Salamanca: Alba de Tormes, Peñaranda de Bracamonte y Salamanca.
- Segovia: Cuéllar.
- Soria: Campo de Gómara, Tierras Altas y Valle del Tera.
- Valladolid: Centro, Sur, Sureste y Tierra de Campos.
- Zamora: Campos-Pan.
Estas regiones se encuentran en el epicentro de la crisis del topillo campesino, y en ellas se aplicarán las nuevas medidas de flexibilidad de inmediato.
Resolución Publicada en el Portal PAC
El documento que detalla todas estas medidas ya está disponible para consulta en el Portal PAC de la Junta de Castilla y León. Los agricultores y las Organizaciones Agrarias Profesionales (OPAS) pueden acceder a él para conocer los detalles específicos y asegurarse de cumplir con las nuevas normativas. medidas agronómicas y sanitarias recomendadas
Un Esfuerzo Colaborativo
El anuncio de estas medidas se produjo durante un encuentro entre el viceconsejero Jorge Llorente y las Organizaciones Agrarias Profesionales, celebrado en un ambiente de cooperación mutua. La Junta de Castilla y León ha subrayado la importancia de la colaboración entre todas las partes involucradas, destacando que solo a través de un esfuerzo conjunto se podrá controlar la población de topillo campesino de manera efectiva.
Recomendaciones y Medidas Complementarias ante la creciente población de topillos en Castilla y León
Durante la reciente reunión del grupo de coordinación y cooperación para la gestión del topillo campesino celebrada el 31 de julio de 2023, se hizo hincapié en la necesidad de ejecutar una serie de medidas agronómicas y sanitarias complementarias. Entre ellas se destacan:
- Destrucción mecánica de huras y galerías: Es fundamental no solo en los campos de cultivo, sino también en las vías de dispersión, para impedir que el roedor se expanda a nuevas áreas.
- Fomento de depredadores naturales: Medidas que favorezcan la presencia de aves rapaces, que son depredadores naturales del topillo campesino, son esenciales para mantener bajo control la población del roedor.
- Riego frecuente en parcelas de regadío: Incrementar la frecuencia del riego ayuda a hacer el entorno menos favorable para la proliferación del topillo.
- Uso controlado de fitosanitarios: Cuando las condiciones lo requieren, se recomienda el uso de fitosanitarios autorizados, aplicados de manera localizada y controlada para minimizar el impacto ambiental.
La Junta de Castilla y León, a través de su Viceconsejería de Política Agraria Comunitaria y Desarrollo Rural, ha tomado medidas decisivas para enfrentar el desafío que representa el topillo campesino en los campos de cultivo de la región. Con la implementación de prácticas agrarias flexibles y la colaboración activa entre los agricultores y las autoridades, se espera que estas acciones contribuyan significativamente a la reducción de la población de topillos, protegiendo así la integridad de las cosechas y la sostenibilidad del medio ambiente.
