Con el objetivo de revitalizar el uso de infraestructuras en desuso y promover la economía local de las áreas rurales, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a través del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), ha anunciado la apertura de un proceso de subasta pública para la venta de 14 silos. Estos almacenes agrícolas, situados en distintas localidades de Aragón, Castilla y León y Extremadura, forman parte de la red básica de almacenamiento público y serán subastados en el mes de diciembre en la sede del FEGA en Madrid.
La subasta representa una nueva fase en el plan del Ministerio de enajenar bienes inmuebles que, con el paso del tiempo, han dejado de cumplir su función original debido a la disminución de las intervenciones en productos agrícolas a nivel europeo. Según la información proporcionada, la subasta se llevará a cabo bajo un procedimiento de alza con presentación de ofertas en sobre cerrado, una práctica habitual que busca garantizar la transparencia y competitividad del proceso.
Los interesados podrán presentar sus ofertas a partir de hoy, 8 de noviembre, y hasta el 3 de diciembre, mientras que la subasta final tendrá lugar el próximo 18 de diciembre en el salón de actos del FEGA. Esta iniciativa forma parte de un programa que comenzó hace una década y que ha permitido al Estado generar recursos mediante la reutilización de estas infraestructuras.
Los silos ahora en subasta fueron desafectados en virtud de órdenes ministeriales publicadas en 2014, lo cual los desvinculó de su finalidad original de almacenamiento público de productos agrícolas. La decisión de desafectarlos se tomó después de analizar la menor necesidad de intervención en los mercados agrícolas de la Unión Europea, un cambio que ha llevado a una menor dependencia de instalaciones de almacenamiento masivo. Con la reducción de la intervención estatal en el mercado agrícola, estas infraestructuras pasaron a considerarse no esenciales para su propósito original.
Desde entonces, la política del FEGA ha sido poner en el mercado las instalaciones que resultaban obsoletas para usos públicos, facilitando que puedan ser utilizadas para otros fines privados o sociales. Hasta el momento, el organismo ha vendido 77 de estos silos en distintas subastas y cuenta con otros 21, de los cuales 14 son los que ahora salen a subasta. Algunos de los silos restantes están cedidos a organizaciones sin ánimo de lucro o se encuentran en proceso de regularización y, por lo tanto, no pueden ser enajenados en este momento.
El FEGA ve en esta iniciativa una oportunidad para impulsar el desarrollo local en las áreas rurales donde se ubican estos silos, ofreciendo nuevas posibilidades de empleo y atracción de inversiones a estas localidades. La venta de los silos podría generar actividad económica y revitalizar áreas que durante años han visto una reducción en el empleo y la actividad agrícola. Los adjudicatarios podrán adaptar los silos a sus necesidades particulares, ya sea para usos industriales, logísticos o agrícolas, lo que podría representar una ventaja en términos de rentabilidad y aprovechamiento de recursos.
El proceso de subasta, que es de carácter público, se regirá por un pliego de condiciones particulares disponible en la página web del FEGA. Los interesados en participar en el acto deberán cumplir con varios requisitos, entre los que se incluye la constitución de una garantía económica equivalente al 5% del precio de tasación del silo en cuestión. Este requisito asegura que quienes participen en la subasta lo hagan de forma seria y comprometida, además de establecer una base sólida para el proceso.
La subasta contará con un máximo de cuatro rondas por cada silo, permitiendo una reducción en el precio de salida en cada una de ellas para incentivar la venta. Este formato escalonado busca atraer una mayor cantidad de ofertas y ampliar la competitividad del proceso, de forma que las instalaciones puedan ser adquiridas por aquellos que ofrezcan condiciones favorables y sostenibles para su uso futuro.
Los adjudicatarios tendrán, además, la opción de aplazar el pago durante un plazo máximo de 10 años, lo cual facilita la viabilidad económica para nuevos proyectos que se establezcan en las zonas rurales. El primer pago deberá ser de, al menos, un 10% del precio de adjudicación, lo cual representa una inversión inicial asumible que permitirá activar el potencial de cada instalación rápidamente y sin generar una carga financiera excesiva en el corto plazo.
La venta de los silos representa una oportunidad significativa para las áreas rurales de Aragón, Castilla y León y Extremadura, muchas de las cuales enfrentan desafíos económicos y poblacionales. Estos inmuebles, construidos en su día para el almacenamiento de cereales y otros productos agrícolas, ahora podrán utilizarse para otros fines, generando así nuevas oportunidades para sus comunidades.
El Ministerio ha subrayado que estos proyectos pueden convertirse en polos de actividad económica, facilitando la creación de empleo local y atrayendo a inversores que impulsen nuevas actividades empresariales en las zonas donde se encuentran. Algunos de los usos alternativos podrían incluir almacenes logísticos, espacios de coworking rural, instalaciones agroindustriales o incluso centros de innovación tecnológica en zonas rurales, un sector en expansión que ofrece oportunidades para la digitalización y modernización del campo español.
La reactivación económica que se espera con estas ventas no solo beneficiaría a las localidades directamente implicadas, sino que también tendría un impacto positivo a nivel regional. A través de la subasta, el FEGA busca promover que estas infraestructuras pasen a manos de entidades que puedan contribuir al desarrollo sostenible y generar valor agregado, en sintonía con los objetivos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Promoción y Transparencia del Proceso de Subasta de silos
Para asegurar la transparencia y el acceso a la información sobre esta iniciativa, el Ministerio de Agricultura y el FEGA han adoptado una estrategia de difusión múltiple. El anuncio de la subasta y los detalles del proceso se han publicado en el Boletín Oficial del Estado, en el Boletín Oficial de las provincias correspondientes y en los tablones de anuncios de los ayuntamientos de las localidades donde se encuentran los silos.
Además, el proceso también se ha incluido en la Plataforma de Contratación del Sector Público, que garantiza el acceso de los interesados y proporciona una vía oficial de comunicación y gestión del proceso. La combinación de estas plataformas busca dar a conocer las condiciones de la subasta a nivel local, regional y nacional, fomentando así una participación amplia y plural.
Esta política de enajenación de activos en desuso, iniciada hace una década, responde a la evolución del sector agrícola europeo y a la necesidad de optimizar el uso de los recursos públicos. Con la progresiva disminución de las intervenciones en los mercados agrícolas europeos, se han ido reduciendo las necesidades de almacenamiento, lo que ha llevado a estos activos a una situación de subutilización.
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha destacado que este proceso es coherente con la estrategia de la Unión Europea para promover una economía rural más dinámica, sostenible y resiliente, en línea con las metas del Pacto Verde Europeo y la digitalización rural. La venta de estos silos se considera un paso estratégico hacia la modernización de las estructuras agrarias y una mejor distribución de los recursos en favor del desarrollo socioeconómico.
En definitiva, la puesta en venta de estos 14 silos por parte del FEGA representa una apuesta por la eficiencia de los recursos y el dinamismo del sector agrícola. Al pasar estos activos a manos privadas, se espera que puedan convertirse en motores de desarrollo local, generando empleo y atrayendo inversiones en las regiones afectadas, revitalizando de esta forma la economía rural en el contexto de un mundo cada vez más digital y diversificado.