
La Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios (FESVET) ha elevado una petición formal al Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez Pérez-Castejón, exigiendo la retirada inmediata del Sistema Informático Central de Control de Prescripciones Veterinarias de Antibióticos (PRESVET), cuya aplicación obligatoria entró en vigor el pasado 2 de enero de 2025. Paralelamente, la federación ha iniciado contactos con diferentes entidades del sector para consensuar un calendario de movilizaciones en caso de que sus demandas no sean atendidas.
El origen del conflicto: La digitalización de las prescripciones
La implementación de PRESVET responde a la obligación de adaptación al Reglamento (UE) 2019/6, que busca reforzar el control del uso de medicamentos antimicrobianos en la sanidad animal para prevenir la resistencia a los antibióticos. Según el Real Decreto 666/2023, desde el 2 de enero de 2025, todas las prescripciones veterinarias deben registrarse obligatoriamente en PRESVET.
Si bien el objetivo de esta normativa es la reducción del uso inadecuado de antibióticos, la comunidad veterinaria ha manifestado su profundo malestar con la plataforma. Según los datos del Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN), en el sector de sanidad animal ya se ha logrado una reducción del 69,5 % en el consumo de antimicrobianos desde 2014, posicionando a España como el país europeo con mayor disminución en el uso de antibióticos veterinarios. En contraste, en la sanidad humana la reducción ha sido del 17 % en el mismo período.
FESVET denuncia un sistema burocrático que dificulta la labor veterinaria
Desde la federación denuncian que la carga administrativa que supone PRESVET entorpece el ejercicio clínico y anula el criterio profesional de los veterinarios. Especialmente en el ámbito de la clínica de pequeños animales, los profesionales señalan que la plataforma limita la capacidad de tomar decisiones médicas oportunas, generando consecuencias negativas como:
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Retrasos en tratamientos urgentes por dificultades en la prescripción electrónica.
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Incremento del riesgo de automedicación por parte de los propietarios.
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Dificultad para atender animales sin identificar, lo que perjudica a protectoras y refugios.
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Costes adicionales en la compra de medicamentos, afectando a la economía de los propietarios.
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Aumento de sanciones por errores administrativos derivados del uso de la plataforma.
El impacto de PRESVET en la veterinaria de producción y equina
Para los veterinarios de animales de producción y equinos, la digitalización de las prescripciones no es una novedad, ya que PRESVET se ha venido utilizando en estos sectores. Sin embargo, desde FESVET recuerdan que el consumo de antibióticos en animales de compañía representa menos del 1 % de la producción farmacéutica de antimicrobianos, por lo que consideran que la aplicación de esta normativa es desproporcionada y carece de justificación científica suficiente.
Además, recalcan que el Reglamento (UE) 2019/6 establece un plazo de 8 años para la implementación de esta medida en animales que no producen alimentos, por lo que España podría haber aplazado su aplicación hasta 2029. De hecho, el proyecto ESVAC (European Surveillance of Veterinary Antimicrobial Consumption) contempla la recopilación de estos datos sin la intervención directa de los veterinarios prescriptores.
Críticas a la falta de soluciones por parte del Gobierno
FESVET también se ha mostrado crítica con la gestión del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, ya que consideran que la Nota Aclaratoria emitida el 15 de enero de 2025 sobre la aplicación de PRESVET en animales no identificados no resuelve los problemas planteados y mantiene intacto el régimen sancionador.
A esto se suma la preocupación del sector por el mantenimiento del IVA al 21 % en los servicios veterinarios, lo que supone un sobrecoste que afecta tanto a clínicas como a propietarios y que, según denuncian, desincentiva el acceso a la atención veterinaria adecuada.
Las peticiones de FESVET al Gobierno
En su escrito al Presidente del Gobierno, FESVET exige tres medidas clave:
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Suspensión inmediata de PRESVET hasta que su implementación sea consensuada con los representantes del sector veterinario.
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Reducción del IVA veterinario, actualmente en el 21 %, para aliviar la carga económica sobre propietarios y profesionales.
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Revisión de la adscripción de la veterinaria al Ministerio de Sanidad, en lugar de Agricultura, para reconocer su papel como profesión sanitaria.
Hacia una movilización del sector veterinario
Ante la falta de respuesta por parte del Gobierno, FESVET ha iniciado una ronda de contactos con distintos actores de la profesión veterinaria, incluyendo patronales, colegios, asociaciones profesionales, sociedades científicas y plataformas del sector, con el objetivo de establecer un calendario de movilizaciones en caso de que no se atiendan sus demandas.
Fuentes internas de la federación han adelantado que no se descartan protestas a nivel nacional, con cierres de clínicas y paros sectoriales, como ya ha ocurrido en otros países europeos en situaciones similares.
Conclusión: Un conflicto en crecimiento
El malestar del sector veterinario ante la imposición del sistema PRESVET refleja un problema más amplio de desconexión entre las políticas públicas y la realidad profesional. La comunidad veterinaria, que ha sido clave en la reducción del uso de antibióticos en España, considera que esta normativa impone una carga desproporcionada y pone en riesgo la salud de los animales y la viabilidad de muchas clínicas.
A medida que avancen las negociaciones y se concreten las movilizaciones, será clave observar si el Gobierno responde a las demandas de un colectivo que desempeña un papel esencial en la sanidad animal y la salud pública.