La segunda estimación para la cosecha de cereales, en Brasil, duranta la campaña 2022/23 indica un volumen de producción de 313 millones de toneladas, un aumento del 15,5% si se compara con el resultado obtenido en el último ciclo, lo que representa casi 42 millones de toneladas más. El crecimiento refleja un aumento estimado de la superficie plantada de soja.
En general, el área sembrada en el país debe llegar a 76,8 millones de hectáreas, frente a los 74,5 millones de hectáreas cultivadas en 2021/22, según se desprende de la 2ª Encuesta de Granos de la Cosecha 2022/23, divulgada, recientemente, por la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab).
SOJA
Según la encuesta, se prevé que se destinen a la siembra de soja unos 43,2 millones de hectáreas en todo el país. Con una productividad prevista de 3.551 kg/ha, se espera que la producción sea de unos 153,5 millones de toneladas. La siembra de la cosecha de oleaginosas de 2022/23 alcanza el 57,5% de la superficie prevista tras un comienzo lento debido a las lluvias localizadas en algunos estados. En Mato Grosso, el principal estado productor del grano, las labores se acercan al final y los cultivos muestran un buen desarrollo, a pesar de la irregularidad de las lluvias. En Goiás, Minas Gerais y Matopiba, la siembra continúa a un ritmo más lento que el año pasado debido a las condiciones meteorológicas de octubre. En Mato Grosso do Sul, se considera uno de los cultivos con mejor desarrollo en los últimos años. En Rio Grande do Sul, el inicio de la siembra continúa en un porcentaje inferior al registrado en el mismo período del ciclo pasado; mientras tanto, en Paraná y Santa Catarina, las bajas temperaturas y las lluvias excesivas comprometen el desarrollo inicial del cultivo en varias regiones.
MAÍZ
En el caso del maíz, se prevé una producción total de 126,4 millones de toneladas con una reducción del 3,1% de la superficie a cultivar, atribuida al aumento de los costes de producción y a la alta presión de determinadas plagas y enfermedads.
La Conab también prevé una reducción de la superficie destinada a arroz y frijoles. En el caso del arroz, el mayor descenso se produce en la superficie de cultivo de secano. Con una superficie estimada de 1,5 millones de hectáreas y una recuperación de la productividad media de 6.667 kg/ha a 7.012 kg/ha, ya que la pasada campaña estuvo marcada por la sequía en el sur del país, la cosecha de cereales se estima en 10,6 millones de toneladas. En el caso de las leguminosas, la disminución debería alcanzar el 2,7% de la superficie total que se prevé sembrar, sumando todos los ciclos de cultivo. Aun así, la producción total de judías en el país se estima en 2,9 millones de toneladas.
TRIGO
Entre los cultivos de invierno, destaca la cosecha récord de trigo. Se espera que los agricultores recojan 9,5 millones de toneladas de grano en esta cosecha, un 23,7% más que en el ciclo anterior. El buen resultado se debe obtener incluso con la reducción de la productividad de los cultivos en Paraná, dañado por el exceso de humedad, registrada a lo largo de septiembre y octubre de este año, que también tiende a reducir la calidad del respectivo producto cosechado. La situación adversa en el estado de Paraná fue compensada por las condiciones climáticas favorables en Rio Grande do Sul, con rendimientos superiores a 55 sacos por hectárea y buena calidad del grano cosechado.
