La lluvia de las dos últimas semanas, aseguran desde la Federación de Regantes Andaluces, Feragua, ha mejorado el ánimo a todos, pero no hay motivos para echar las campanas al vuelo. A día de hoy, aseguran que la situación hidrológica en Andalucía ha mejorado solo ligeramente, aunque algunas aportaciones sí se han producido. Sobre todo, las precipitaciones han permitido que el suelo se encuentre en las condiciones de humedad adecuadas para que las próximas lluvias sí tengan una mayor incidencia en el volumen de agua almacenada.
Concretando todo esto en números, contar que las precipitaciones han incrementado el nivel de embalses en 600 hm3 en todas las cuencas andaluzas, de los que más de 400 son del Guadalquivir, 150 el Tinto Odiel Piedras, unos 25 en la cuenca mediterránea andaluza y unos 70 en el Guadalete-Barbate. El nivel de embalses ha subido cinco puntos de media en Andalucía, al igual que en el Guadalquivir.
Aunque todos los sistemas han mejorado, solo la cuenca del Tinto-Odiel-Piedras, en Huelva, y el sistema Guadalfeo, en Granada, presentan un nivel de almacenamiento que permita intuir que la próxima campaña pueda desarrollarse con normalidad. En el resto de cuencas harán falta muchas más lluvias de invierno y primavera para conseguir esa normalidad, que todos esperamos conseguir.