Los precios mundiales del ganado se han dividido en dos grupos distintos: los de América del Norte y Europa y los del resto del mundo. En Estados Unidos, la disminución de la oferta y la fuerte demanda de los consumidores están elevando los precios del ganado, mientras que en la mayoría de las otras regiones, la menor demanda de los consumidores y/o el aumento de la oferta han provocado que los precios se debiliten. En comparación con hace 12 meses, los precios del ganado estadounidense han aumentado casi un 30%, mientras que los precios del ganado australiano han caído más del 30%. Esta división de precios es la mayor, aseguran desde Rabobank en el informe sobre la evolución que se espera a nivel mundial para el sector del vacuno de carne, que se ha visto en los últimos diez años y se compara con el período de 2014, cuando los precios estadounidenses también estaban en niveles muy altos. Esta separación de precios tendrá consecuencias para la competitividad de los exportadores de carne vacuna y, como resultado, esperan ver, afirman desde la citada agencia, algún cambio en los volúmenes comerciales.
Rabobank confía en que que la producción total de los seis países/regiones monitoreados disminuya ligeramente (-1% interanual) en el tercer trimestre de este año antes de volver a niveles similares a los de 2022 en el cuarto y primer trimestre de 2024. Las caídas en Nueva Zelanda y Estados Unidos compensarán el crecimiento en Australia, Brasil y China en el tercer trimestre de 2023.
Un tema constante en la mayoría de los mercados –excepto Estados Unidos– es la menor demanda de los consumidores y las cadenas de suministro completas. En varias regiones, particularmente en países asiáticos, las compras de carne vacuna realizadas hasta 2022 y 2023 en previsión de la recuperación de Covid no se han consumido. Ahora forman parte de los niveles de existencias en crecimiento que también incluyen otras proteínas. La menor demanda de los consumidores está dificultando el movimiento de estos volúmenes a través del sistema. Un desafío adicional es que los precios mundiales de la carne vacuna han caído durante este período y algunas de estas existencias se habrían comprado cuando los precios eran más altos.