Propuestas de UPYD para el sector agrario de Castilla y León

Agronews Castilla y León

14 de mayo de 2015

img 1192 copiar copiar

Siguiendo con la recopilación de las propuestas que para el sector agrario de Castilla y León realizan los distintos partidos políticos que concurren a las elecciones autonómicas del 24 de mayo, en esta ocasión presentamos las de Unión Progreso y Democracia (UPyD)

Introducción y diagnóstico

El sector agroganadero o agrario es de vital importancia en España y muy especialmente en Castilla y León debido a diversos motivos:

1. En lo económico, es un sector sobre el que pivota la industria agroalimentaria sumando entre ambos sectores cerca del 15% del total de los más de 60.000 millones de euros que configuran el Producto Interior Bruto total de Castilla y León. Además Castilla y Léon aporta un elevado porcentaje del valor total de la rama agraria nacional predominando en nuestra región, algo más el sector ganadero sobre el agrícola. Estos hechos, deben contemplarse, aseguran dentro de UPyD, dentro del ámbito indiscutible del reconocimiento del sector como dinamizador de otras áreas dependientes como son los relacionados con los medios de producción agrarios, los del ámbito de la industria de piensos, maquinaria agrícola y ganadera, servicios veterinarios, servicios agronómicos, compra de productos químicos, biológicos, actividades de ocio, deportivas, etc..

2. Por otro lado, también debe ser considerado como un sector estratégico por la producción de bienes de primera necesidad

3. Asimismo, es un sector especialmente vulnerable; por un lado, debido a la dependencia de la producción de factores imprevisibles de tipo atmosférico, epizoóticos, etc… y, por otro lado, como consecuencia de los problemas intrínsecos de las explotaciones de Castilla y León generalmente de pequeña dimensión y con personal poco cualificado.

4. Por último, pero no menos importante, es destacable el hecho de que las explotaciones agrariascastellanoleonesas son un elemento determinante en la vertebración del medio rural. Se asientan y condicionan la gran mayoría de los 50 millones de hectáreas que conforman la superficie total de nuestro país. A parte de su actividad productiva, los trabajadores agrarios nutren los censos rurales y transmiten de “padres a hijos” tradiciones y cultura rural. A su vez, este “modo de vida” es el que puede asegurar el cuidado del territorio de una manera sostenible en su triple vertiente (medioambiental, económica y de justicia social) ya que, los agricultores y ganaderos son los primeros y más genuinos ecologistas.

Propuestas para la agricultura y el medio rural de Castilla y León

En primer lugar, UPYD propone un gran pacto nacional, para poner en marcha un plan de dinamización del sector que implique a todos los agentes implicados (tanto de las administraciones públicas como de las asociaciones agrarias con o sin ánimo de lucro). En suma, se trata de constituir una mesa de negociación que apueste, de una vez por todas, por el futuro del campo español, con los objetivos de mantener, desarrollar, promover y afianzar todos los sectores de producción agraria ya existentes, así como la puesta en marcha de todo tipo de iniciativas agrícolasganaderas-forestales que potencien el verdadero motor económico de la región, ya que, los datos avalan que es el sector que mejor está soportando la profunda crisis económica que padecemos aumentando incluso sus cifras de exportaciones respecto a niveles pre-crisis.

Todo ello con el objetivo de que esta mejora coyuntural pueda transformarse en una mejora estructural que nos ayude a salir de la misma. Este gran pacto se fundamentaría principalmente en:

  • El desarrollo de medidas que favorezcan la incorporación de nuevos productores agrarios. Las ayudas deben ser previas a la incorporación. No olvidamos que los jóvenes están llamados a sustituir a los actuales productores cuya media de edad es superior a los 60 años en nuestra región. Tampoco renunciamos a la promoción de otros sectores relacionados. Nos hacemos eco de que la principal preocupación en nuestro país es el paro y el sector agrario tiene potencial de creación de empleo siempre que apostemos decididamente por los jóvenes.
  • Fomentar la aplicación de nuevas tecnologías en la producción y la formación especializada en comercialización agraria a través de grados y módulos relacionados con el sector agrícola-ganadero-forestal.
  • Fomentar las cadenas de comercialización cortas donde estén sólo los eslabones imprescindibles. Éstos se deben repartir el valor añadido de los productos de una forma proporcional al trabajo y riesgo de pérdida del capital invertido y no repercutir la mayor parte de los riesgos, y la menor parte de los ingresos, al eslabón más débil (el agricultor-ganadero) que deja de obtener un porcentaje desorbitado en forma de lucro cesante derivado de su situación de debilidad respecto a las grandes superficies de la distribución cuyos cuantiosos márgenes no suelen repercutir en la economía de nuestro país.

Más allá del citado pacto, también hacemos las siguientes propuestas a todos los ciudadanos de Castilla y León y en particular a nuestros agricultores y ganaderos:

1. Desarrollo, de manera inmediata la ley 12/2014 por la que se determina el procedimiento para clarificar la representatividad de las organizaciones profesionales agrarias.

2. En las Cortes de Castilla y León, UPyD participará en el desarrollo reglamentario de la Ley Agraria de Castilla y León priorizando el cumplimiento de sus objetivos, desde la eficacia y la eficiencia, sin un aumento indiscriminado de organismos innecesarios que pudieran restar fluidez e imparcialidad en la toma de decisiones.

3. Gestión más rigurosa los recursos financieros de la Administración para el sector agrario mediante la promoción de la adaptación de las líneas de financiación existentes y la creación de nuevas líneas específicas compatibles con las ayudas europeas donde prime la agilidad en los pagos, la transparencia y la desincentivación en la reincidencia de infracciones.

4. Desde UPyD, y desde el rigor, apoyan en principio la actual política de la Unión Europea que exige que en la importación de productos procedentes de terceros países se cumplan unas reglas de acceso mínimo bajo el principio de equivalencia, de estándares compatibles con la legislación higio-alimentaria, de bienestar animal y laboral de la UE (esto es, estándares de calidad del producto, de control de la seguridad alimentaria, de bienestar animal y de condiciones laborales dignas de los trabajadores en el país de origen), siempre que la entrada masiva de productos procedentes de terceros países no distorsione el comercio interior. En un mundo cada vez más globalizado y en el que en el seno de la Organización Mundial de Comercio se promueve la abolición total de la excepción agraria, los productores de Castilla y León se encuentran con que sus productos no pueden competir en precios debido a que los medios de producción en nuestra península en general, y en nuestra región en particular, son más costosos. Esto obliga, por un lado, a plantear una apuesta definitiva por el asociacionismo que nos permitirá una “economía de escala” suficiente y, por otro, a la venta de productos amparados por etiquetas de calidad diferenciada como son los producidos regulados por denominaciones de orígenes, indicaciones geográficas, especialidades tradicionales, agricultura integrada o ecológica que muchas veces proceden de nuestras razas y cultivos autóctonos y que van dirigidos a clientes con un poder adquisitivo medio-alto lo que nos reportará un valor añadido que compense nuestros mayores costes.

5. En UPyD busca un equilibrio entre el patrimonio no material de la biodiversidad representado, entre otros animales, por el lobo, la avutarda, el oso, etc… con el patrimonio material de la renta de nuestros agricultores y ganaderos por lo que, dentro del respeto a las normativa, defiende la existencia de fauna silvestre, pero a la vez, exige la aplicación de diversas sentencias judiciales que determinaron que se habilite un sistema de resarcimiento de los daños causados por las especies silvestres en base a la responsabilidad patrimonial de todos (no sólo de los productores). Demandan que se habilite un mecanismo ágil que compense de manera integral y satisfactoria al agricultor y ganadero sin necesidad de contar con un seguro privado para ese fin. Para ello es necesario crear un cuerpo de tasadores de la administración que determinarán la autoría y el alcance de los daños sin escatimar en recursos siempre y cuando estén debidamente justificados.

6. UPyD apoya la biodiversidad de las razas y cultivos autóctonos a las que, en ocasiones, no se ha dado la oportunidad de conseguir el mismo volumen de producción que los foráneas que finalmente se están imponiendo. Estas razas y cultivos foráneos se han consolidado desplazando a las nuestras debido a que empezaron a seleccionarse hacia el volumen productivo mucho antes, pero no son comparables en cuanto a la calidad de producción ni en cuanto a la rusticidad o adaptación al medio respecto a nuestras especies autóctonas.

7. En cuanto a especies invasoras como el avispón asiático proponen la elaboración de un protocolo específico de actuación para esta especie y otro general para las nuevas especies invasoras que irán llegando para responder de una manera precoz a estos nuevos desafíos.

8. En cuanto a las recurrentes plagas de “topillos” también proponen la elaboración de un protocolo de actuación rápida que determinará la forma de actuar ante estos roedores. En este protocolo, la administración con sus propios medios y en colaboración del sector, será la responsable de dar una solución ágil y eficaz sin necesidad del aumento de gasto en empresas intermediarias ni de inundar el medio ambiente con sustancias químicas que afectan a los predadores naturales.

9. Proponen incentivar el aprovechamiento de pastos, especialmente en las zonas que actúan como cortafuegos ya sean naturales o no, lo que supondría además una vía eficaz de prevención de incendios con el consecuente ahorro en medios de extinción.

10. UPyD aboga por la modernización de los sistemas de regadío así como por el uso racional del agua en la producción agrícola. Se han de favorecer las nuevas técnicas de cultivos y la investigación en las variables de producción agraria, financiando la innovación para incrementar la producción por hectárea. En una comunidad autónoma como la nuestra los micro-embalses deben ser una herramienta esencial para el futuro.

11. Apoyo a la creación de puestos de trabajo de calidad relacionados con la investigación en el ámbito de las mejores técnicas disponibles que tratan de disminuir la emisión de gases de efecto invernadero y de la huella de carbono de nuestros productos. Estas disminuciones de emisiones, además, permitirán disminuir los importes de nuestras compras de derechos de emisión lo que generará un ahorro que compensará la inversión productiva en los puestos de trabajo citados y nos permitirá cumplir con los objetivos de la comisión europea para el 2030 que presentará en la cumbre del clima de diciembre de 2015 en París.

12. Proponen crear cursos de formación en la gestión, transformación y comercialización de productos agraria en las escuelas de capacitación agraria en la que ha de realizarse una profunda reforma.

13. Creación de la figura del “gestor agrario” que conozca en profundidad esos productos, el mercado a quien tienen que ser dirigirlos y las nuevas tecnologías que ayuden a su distribución para aquellas cooperativas grandes o para aquellas que se integren formando una mayor con el objeto de estimular este tipo de fusiones que den lugar a un incremento de tamaño favoreciendo su competitividad.

14. En UPyD apoya que las subvenciones agrarias se destinen a los productores activos que para nosotros son los que reciben de sus ingresos agrarios al menos el 20% de sus ingresos totales; priorizando, dentro de este grupo, en primer lugar, a los agricultores a título principal, es decir los que viven principalmente del “campo” y, en un segundo lugar, a los agricultores profesionales que obtienen al menos un 25% de la actividad agraria propiamente dicha y un 25% de otros sectores también relacionados con el mundo rural. Por último, aseguran que ya defendieron en el Parlamento europeo unos techos máximos de cobro (descontados los gastos ocasionados por la contratación de personal) debido a que creen en la función redistributiva de la riqueza ejercida a través del buen uso del dinero público que aumentaría el número de puestos de trabajo agrarios. Por ello también defendemos la posibilidad ofertada en la nueva reforma agraria de priorizar las ayudas en las primeras 30 hectáreas. Pero, a la vez rigurosos con la asignación de fondos públicos, demandando sanciones coercitivas y ejemplarizantes (sobre todo a los reincidentes) y exigen una actuación inspectora seria en lo referente a los testaferros agrarios, es decir, titulares ficticios de explotación utilizados para el cobro de subvenciones.

15. UPyD asegura ser conscuente del grave problema que surgirá a partir de abril de 2015 en el sector lácteo y en años posteriores en el sector del viñedo y del azúcar por los cambios aprobados de la nueva reforma de la política agraria común. Es necesaria una alternativa viable a estos sectores que les permita seguir generando riqueza ya que, de no ser así, están abocados al cierre.

16. Harán un seguimiento continuo de los casos de robos y hurtos en las explotaciones agrarias para demandar el personal necesario de cuerpos y fuerzas de seguridad para atajar de raíz estos casos que dificultan la labor agraria, muy especialmente cuando los materiales hurtados o robados son medios de producción indispensables para el riego en determinadas épocas claves del crecimiento vegetativo de los cultivos.

17. UPyD se compromete a promover un proceso de renovación y mejora de la red de comunicaciones y servicios en general con el objetivo de mitigar o, incluso, revertir el fenómeno de éxodo rural aprovechando el cada vez más prometedor fututo del denominado “Teletrabajo” y asi a la vez potenciamos la calidad de vida en rural.

Todas estas peticiones se enmarcarían en el programa de desarrollo rural de Castilla y León pues se adaptan plenamente a las líneas cofinanciadas por la Unión Europea y cumplen un requisito básico para UPyD consistente en que los recursos públicos deben destinarse con rigor a inversiones productivas que nos permitirán romper el actual circulo vicioso donde un déficit público crónico hipoteca el futuro de los castellano y leoneses y demás ciudadanos españoles



Share This