En un operativo clave para la seguridad rural, la Guardia Civil de la Región de Murcia ha dado un importante golpe contra el robo de cobre en el Campo de Cartagena . La reciente operación, enmarcada en el ‘Plan contra el robo de cobre’, culminó con la detención de tres individuos acusados de la comisión de ocho robos con fuerza en explotaciones agrícolas y ganaderas de las diputaciones de Pozo Estrecho, La Aljorra y El Albujón, además de un delito de usurpación de estado civil .
La operación ha permitido la recuperación de más de 200 kilos de cobre robado y la incautación de un vehículo que los presuntos delincuentes empleaban para trasladar el material sustraído. El valor de los daños y del material robado se estima en unos 100.000 euros , una cifra que refleja la gravedad del impacto que estos delitos tienen en la economía agrícola local.
Inicio de la investigación y el papel de los equipos ROCA
La investigación comenzó a principios de este año, cuando las autoridades detectaron un aumento significativo en los robos de transformadores eléctricos y cables de cobre en diversas fincas de la comarca del Campo de Cartagena. Este incremento alarmante en la actividad delictiva llevó a la Guardia Civil a intensificar sus esfuerzos, asignando el caso a los equipos ROCA (Robos en el Campo) , unidades especializadas en combatir este tipo de delitos en entornos rurales.
Los equipos ROCA llevaron a cabo inspecciones oculares exhaustivas en los lugares afectados, lo que les permitió descubrir el modus operandi de los ladrones. Los delincuentes arrancaban los transformadores de su habitáculo y los desguazaban en el mismo lugar para extraer las valiosas bobinas de cobre . Además de los transformadores, los criminales también robaban el cobre de otras conducciones eléctricas de las fincas, afectando gravemente la operatividad de las explotaciones agrícolas y ganaderas, especialmente los sistemas automatizados de alimentación del ganado.
La magnitud del daño: 100.000 euros en pérdidas
El impacto de estos robos no se limita únicamente al material sustraído. El valor total de los daños causados en las infraestructuras agrícolas, sumado al coste de los materiales robados, ronda los 100.000 euros . Este tipo de delitos no solo representa una pérdida económica significativa para los agricultores, sino que también interrumpe sus operaciones diarias, poniendo en riesgo la producción y la sostenibilidad de las explotaciones.
Rastreo y recuperación del cobre robado
Una vez identificado el patrón de los robos, la Guardia Civil centró su atención en los posibles destinos del cobre sustraído. Para ello, se realizaron inspecciones en varios centros de reciclaje de la región. A pesar de que los delincuentes intentaron evadir la detección utilizando documentación fraudulenta al vender el cobre, los agentes lograron rastrear el origen ilícito de los materiales. Estos indicios fueron clave para avanzar en la investigación.
El seguimiento realizado por los equipos ROCA permitió localizar a los sospechosos cuando se dirigieron a un centro de gestión de residuos metálicos en un polígono del municipio de Alcantarilla. Durante esta intervención, los agentes encontraron en su poder 200 kilos de cobre y el vehículo que utilizaban para el transporte del material robado. Tanto el cobre como el vehículo fueron incautados y puestos a disposición judicial.
Detención de los sospechosos y desmantelamiento de la red criminal
La investigación culmina con la detención de tres hombres , residentes en Lo Ferro-Torrepacheco, quienes han sido identificados como los presuntos autores de los ocho robos investigados y del delito de usurpación de estado civil. Según se desprende de las pesquisas, los detenidos formaban parte de un grupo criminal especializado en este tipo de robos, que operaba de manera meticulosa, realizando estudios previos de las zonas y seleccionando cuidadosamente sus objetivos.
Los asaltos fueron llevados a cabo de madrugada , aprovechando la oscuridad y la falta de vigilancia para sustraer los transformadores y el cobre sin ser detectados. Tras ser arrestados, los detenidos, junto con los efectos recuperados y el vehículo intervenido, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Cartagena , donde deberán enfrentar las acusaciones por los delitos cometidos.
El Plan contra el robo de cobre: un esfuerzo continuo
El éxito de esta operación subraya la importancia del Plan contra el robo de cobre , una iniciativa que la Guardia Civil de la Región de Murcia lleva implementando para combatir este tipo de delitos que afectan gravemente a la economía rural. Los equipos ROCA , que fueron creados específicamente para abordar los problemas de seguridad en el campo, han demostrado una vez más su eficacia en la lucha contra el crimen organizado en áreas rurales.
El robo de cobre se ha convertido en un problema persistente en muchas regiones de España, debido al alto valor de este material en el mercado negro. En respuesta, la Guardia Civil ha intensificado sus esfuerzos para desarticular las redes criminales que se dedican a este tipo de actividad, utilizando tanto técnicas de investigación tradicionales como avanzadas, y colaborando estrechamente con otros organismos y entidades del sector agrícola y de reciclaje.
El impacto del robo de cobre en la economía agrícola
Este caso específico en el Campo de Cartagena es un ejemplo claro de cómo el robo de cobre no solo afecta a las empresas de reciclaje, sino que también tiene un impacto directo y devastador en la economía agrícola . La pérdida de transformadores y cables eléctricos interrumpe las operaciones diarias, reduce la eficiencia de las explotaciones y genera costos adicionales para los agricultores, que deben reemplazar los equipos robados y reparar los daños causados.
Además, el robo de cobre puede tener consecuencias a largo plazo en la producción agrícola, ya que la falta de electricidad puede afectar el riego, la alimentación del ganado y otras operaciones críticas. Esto, a su vez, puede traducirse en menores rendimientos y pérdidas económicas significativas para los agricultores y ganaderos afectados.
La colaboración ciudadana: clave en la lucha contra el robo de cobre
La colaboración de la ciudadanía es esencial en la lucha contra este tipo de delitos. Las autoridades han hecho un llamamiento a los vecinos de las áreas rurales para que informen sobre cualquier actividad sospechosa que puedan observar en sus comunidades. Esta cooperación es vital para prevenir futuros robos y para ayudar a las fuerzas de seguridad a actuar rápidamente cuando se detecta actividad delictiva.
La Guardia Civil continúa trabajando para mejorar la seguridad en las zonas rurales y para proteger a los agricultores y ganaderos que son el pilar de la economía local. A través de operativos como este, se demuestra que la lucha contra el robo de cobre es una prioridad para las autoridades, y que los delincuentes que cometen estos actos serán perseguidos y llevados ante la justicia.