Más gasto en comunicación y una mayor adaptación al gusto de los consumidores, claves para la mejora del sector vitivinícola español en los próximos años.

Berta Redondo

14 de mayo de 2015

Productores, enólogos, bodegueros, distribuidores, restauradores y periodistas especializados en el mundo del vino unidos para plantear soluciones a los problemas del sector. Esta es la imagen que se vio ayer durante una de las jornadas de FENAVIN 2015 y con la que la Asociación de Periodistas Agroalimentarios de España –APAE- quiere contribuir a mejorar un sector que “necesita asumir que tiene un problema grave”, tal y como apuntó el responsable de Relaciones Institucionales de APAE, Ángel Rico.

Durante el encuentro, los representantes de los diferentes subsectores vitivinícolas, expresaron sus diferentes puntos de vista sobre los problemas que afectan actualmente a este sector. Principalmente, el exceso de producción de uva frente a la caída sostenida del consumo de vino en España, una situación que puede explicarse por la falta de información de los consumidores que hace que el vino se vea como un producto “caro” y sea relegado, en muchas ocasiones, a celebraciones puntuales.

El descenso del consumo de vino en España se ha acelerado a raíz de la crisis, tal y como apuntaron Ignacio Magarzo, Director General de la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados –ASEDAS-; y Alberto Sesé Carrasco, Responsable de Marketing de la Asociación de Cadenas de Restauración Moderna –FEHRCAREM. Ambos coincidieron en la necesidad de invertir más en comunicación y en promoción del vino de cara a los consumidores finales, los que realmente tienen la palabra. “Nos hemos olvidado de los compradores y de la importancia de una buena comunicación” indicó Joaquín Parra de Wine Up, una guía de vinos digital.

En este sentido, Pau Roca, Secretario General de la Federación Española del Vino –FEV- apuntó a que el reto del sector es recuperar el mercado interior ante un cambio generacional. Para ello, el lanzamiento de nuevos productos y formatos de envase adaptados a sectores de población como los jóvenes, las mujeres y los jubilados, y una apuesta por campañas de promoción en los puntos de venta y de restauración ayudarían a mejorar este aspecto y aumentar el consumo.

Sin embargo, la gran atomización del sector, o lo que es lo mismo, la existencia de cerca de 17.000 marcas de vino en España dificulta la existencia de una gran figura que incluya a todos. Se trata, tal y como apuntó Salvador Manjón, miembro de la directiva de APAE y Director de la Semana Vitivinícola, de un problema de definición del sector. “Hay que admitir que el sector es el único que puede autoregularse, no hay que depender tanto de las Administraciones” señaló Manjón, una conclusión con la que todos estuvieron de acuerdo. “En una Unión Europea global, la particularidad de una región no va a ser regularizada desde Bruselas” concluyó Lourdes Zuriaga, Presidenta de APAE.

Con todas estas ideas y conclusiones, APAE elaborará un documento que se enviará tanto a las partes implicadas en el mundo de los vinos como al gobierno regional. Asimismo, harán llegar una propuesta a FENAVIN, de manera que en la próxima edición se pueda analizar si ha habido o no avances en los distintos aspectos que tratará dicho documento.



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