- Desaparece el recebo y simplifica en tres las denominaciones de venta de jamones y paletas: de bellota, de cebo de campo y de cebo
- Precintos de cuatro colores diferentes diferenciarán los productos ibéricos
- Regula de forma más exigente los tiempos de curación y los pesos mínimos
- Exige mayor superficie mínima para la crianza de los animales en cebaderos y establece limitación del número máximo de animales criados en montanera
El Consejo de Ministros ha aprobado hoy, 10 de enero de 2014, la nueva norma de calidad para el jamón, carne, paleta y caña de lomo ibéricos que ofrecerá un etiquetado más claro para no confundir al consumidor. Así lo ha anunciado en la rueda de prensa posterior el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, que ha explicado los cambios que recoge la nueva normativa del ibérico. Cañete ha indicado que desaparece el recebo y la nueva norma establece tres clasificaciones para el jamón: bellota, cebo de campo y cebo y “pata negra” solo podrá designarse para el jamón de bellota 100% ibérico.
Precintos de diferentes colores colocados en el matadero serán los que diferencien el jamón y la paleta:
- Negro para los bellota 100% ibéricos
- Rojo para los bellota ibéricos
- Verde para los de cebo de campo ibéricos
- Blanco para los de cebo ibérico
En el etiquetado se establece la obligatoriedad de indicar el tanto por ciento de raza ibérica, cuando se trate de animales cien por cien ibérico, y en lugar destacado de la misma en los demás casos. Además, se limita la utilización en publicidad y etiquetado de términos que puedan inducir a error al consumidor. Así, se reservan, exclusivamente para la designación «de bellota», los nombres, logotipos, imágenes, símbolos, o menciones facultativas que evoquen o hagan alusión a algún aspecto relacionado o referido con la bellota o la dehesa.
Carga ganadera y montanera
En relación con las razas autorizadas, se ha reforzado el papel del libro genealógico, cuyos certificados pasan a ser la única forma de acreditar la pureza racial, lo que ayudará a preservar la pureza de las mismas. En cuanto a la crianza de los cerdos en montanera, la norma adapta la carga ganadera a la capacidad productiva de la dehesa y establece un número de cerdos por hectárea de dehesa en función de la superficie arbolada cubierta (entre 0,25 y 1,25, cerdos/ha). La norma también regula las instalaciones a las que se exige una mayor superficie mínima para la crianza de los animales en cebaderos: 2m² mínimo para animales de más de 110 kilogramos de peso.
El Real Decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación para los animales sacrificados a partir de esta fecha. Sin embargo se han establecido una serie de períodos transitorios para permitir al sector una adaptación paulatina en temas como la raza, instalaciones y productos en proceso de elaboración.
ASAJA ha sido la primera organización agraria en realizar una valoración sobre la nueva norma del ibérico a la que califica de positiva al «clarificar» el mercado y «garantizar las calidades» al consumidor.
Para la organización agraria la nueva normativa equilibra los controles, incrementándolos y haciendo que se repartan de forma similar entre ganaderos e industria, algo que no sucedía hasta la fecha, denuncian desde esta OPA.
En un comunicado de prensa, ASAJA destaca que todas las novedades que introduce esta nueva Norma van orientadas a mejorar la calidad del producto final, los controles en toda la cadena de producción y la información al consumidor, destacando una carga ganadera menor en montanera, nuevas denominaciones de producto donde la alimentación irá colocada antes que la raza (100% ibérico o ibérico), tiempos superiores de curación de jamones y paletas, pesos mínimos más altos y un etiquetado mucho más estricto. Este esfuerzo adicional, consieran desde la Organización Agraria, deberá ir acompañado de una mejora en los precios que recibe el ganadero, de forma que compense el incremento de los costes que supondrá su aplicación
Desde la Asociación de Criadores de Porcino Ibérico de Castilla y León se entiende que esta Norma será de gran utilidad, siempre y cuanto se lleve a cabo un control riguroso de su cumplimiento, ya que, hasta la fecha, eran, sobre todo, los ganaderos en los que ser desarrollaban los controles más exhaustivos.
Asimismo, tras la Norma aprobada, Asacriber espera que sea el inicio para que pueda proceder a la llevanza del Libro Genealógico del porcino ibérico.
Rosa María Fernández
Agronews Castilla y León
