Los ganaderos de Burgos claman contra la “sinrazón” del fin de las cuotas lácteas

Agronews Castilla y León

3 de mayo de 2015

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La nueva Política Agraria Común está provocando muchos dolores de cabeza a agricultores y ganaderos. No sólo se mantienen las ayudas a los denominados “agricultores de sofá”, aquellos para los que el campo es una actividad secundaria y complementaria, sino que además tienen que enfrentarse a la desaparición de las cuotas lácteas, lo que ya está generando importantes problemas con la industria del sector y bajada de precio del producto. Los sindicatos agrarios aseguran que “va a ser una guerra fratricida”, en la que los más perjudicados serán los ganaderos.

“Va a ser una guerra fratricida”

El sistema de cuotas lácteas se puso en marcha en el año 1984, para regular un sector en el que se producía más de lo que se consumía. Sin embargo, en estos momentos, la demanda internacional supera a la oferta, la Unión Europa ha decidido liberalizar el mercado. Lo que a simple vista podría entenderse como una medida beneficiosa para los productores, en la práctica lo único que consigue es someter aún más a los ganaderos al interés de la industria láctea. Sin cuotas, la industria dispone de más libertad para poner sus condiciones en los contratos de compra de leche, lo que ya está provocando una bajada de los precios.

Intermediación administrativa

De ahí que José Manuel de las Heras, de UCCL, insista en la necesidad de que la administración haga de intermediaria entre las grandes marcas y los ganaderos, a fin de que se puedan garantizar contratos de compra-venta con los que se cubran los costes de producción de la leche. Es verdad que el Ministerio de Agricultura ha desarrollado los “paquetes lácteos”, que obligan a que los acuerdos entre industria y productores tengan una vigencia mínima de un año y las nuevas ofertas de compra se planteen con dos meses de antelación. Sin embargo, no están dando resultados.

“La rentabilidad debe venir vía precio”, insiste De las Heras. Y es que la solución, ante la desaparición de las cuotas, no es incrementar las producciones porque sí. Mientras los precios sean bajos, producir mucho no va a hacer las explotaciones más rentables. Ya lo tendrían que ser, porque los ganaderos han realizado en los últimos años un “grandísimo esfuerzo” inversor para modernizar sus instalaciones y hacerlas más competitivas, recuerda el responsable de UCCL. Ahora lo que hay que conseguir es que se pague lo justo por la leche. Y la clave es la administración.

“La rentabilidad debe venir vía precio”

Lo mismo opina Gabriel Delgado, de la Alianza por la Unidad del Campo UPA-COAG. Los ganaderos ya han perdido patrimonio, porque las cuotas lácteas que han comprado, y que en algunos casos siguen pagando, están perdidas. Lo que hay que intentar ahora es que las explotaciones que son competitivas sean también viables, y de momento no es así. El producto no vale, los precios se están tirando, no hay garantías de contratos con la industria… El sector lácteo es una de las actividades clave para la economía de Castilla y León, así que desde los sindicatos agrarios esperan que la Junta salga en defensa de sus ganaderos.

Ovino y caprino

Por otra parte, Delgado también critica la falta de apoyo de las administraciones al ovino y al caprino. Si en vacuno o en agricultura se han realizado importantes inversiones para modernización de maquinaria, las explotaciones de ovino y caprino no quieren actualizarse. Los jóvenes tampoco quieren incorporarse a esta parte del sector porque “es muy sacrificado, requiere de mucha inversión y no cuenta con un apoyo expreso, económico y funcional, de la Junta”, insiste el responsable de UPA en Burgos, quien ven el futuro de la agricultura y la ganadería en Castilla y León con bastante pesimismo.

Patricia Carro – www.burgosconecta.es



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