Cuestión de tiempo. O del tiempo. Así se podría resumir la producción ecológica y su impacto, cada vez mayor, en el mundo agrario . La producción de este tipo de cultivos que no llevan ningún compuesto químico en abono o herbicida, ha aumentado en los últimos años. Como muestra, un botón: tal y como recogimos en un reportaje anterior, el 2 por ciento del total nacional en hectáreas dedicadas a la agricultura ecológica está en Castilla y León, región que cuenta con más de 750 operadores dedicados a este mundo, que hoy ha querido conocer un poco más a fondo Agronews.
Un mundo que mira al cielo constantemente y que tiene un porcentaje importante en eso, en la medición del tiempo para calcular qué época es la idónea para sembrar, con el consiguiente retraso respecto a la siembra del cultivo tradicional: “Se trata de trabajar con el suelo en lugar de dominarlo, hay que realizar unos análisis muy minuciosos, en fin el proceso es más laborioso” señala Juan Luis Fradejas que tiene una explotación de este tipo desde hace seis años.
Seis años de proyecto
La idea surgió de él mismo, estudiante de INEA que ya había trabajado varios años explorando las posibilidades en los huertos que tiene esta escuela universitaria. Y así se lo propuso a su padre, agricultor de toda la vida, para que lo trasladase a sus terrenos: “Le dije que le demostraría que su explotación iba a ser mucho más rentable económicamente sin usar herbicidas ni abonos”.
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La respuesta fue clara, no lo veía claro: “Muchos agricultores de 55 años en adelante no se paran a analizar estas nuevas opciones de cultivo y prefieren quedarse con las tradicionales, no saben el coste por hectárea de lo que cultivan”. Por eso se sentó con él, charlaron y le convenció de que aunque tuvieran unas producciones medias más bajas, éstas iban a ser más estables.
Un huerto ecológico y saludable
Beneficios que dan a la cartera… y a la salud. Eso opina al menos Irene Ruano quien, junto a su marido tienen también un huerto ecológico de unos 15 metros cuadrados de uso personal en Valladolid: “La gente cada vez se interesa más sobre todo por lo beneficioso que resulta para la salud, sabemos cada vez más lo que comemos y no queremos envenenarnos” asegura.
«En el huerto ecológico hay que observar más, pero no hemos tenido nunca plagas»
En su espacio, Irene tiene unas 25 tomateras, calabacines o ajos, entre otras plantaciones y reconoce que, si bien el precio en la venta al público sí es caro y por eso aún cuesta insertarlo en el mercado, a nivel personal y como productora, merece la pena: “Nunca hemos tenido plagas, realizamos varios tratamientos a lo largo del año para plagas el pulgón y si no recurrimos al macerado de ajo. Hay que estar más pendientes, observarlos más”. Ahora a través de Internet comparte cómo van sus cultivos además de realizar diferentes charlas a ingenieros agrícolas sobre cómo se puede sacar una explotación así adelante.
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Eso sí, nadie dijo que fuera fácil. Son muchas las cuentas que tienen que sacar los productores ecológicos para conseguir esa viabilidad de su explotación : En los últimos cinco años Juan Luis Fradejas, sacaba cerca de 2.740 kg.por hectárea en convencional mientras que en ecológico obtiene 1.920 kg. Sin embargo, los costes son menores, de 250 euros a 165: “Y sin ayudas” matiza. Por lo que el resultado en beneficios es similar.
«Ojalá no se diese ayudas a ningún productor ecológico y se quedase quien lo haga viable»
Las ayudas económicas
Es este punto el que siempre genera más debate. Juan Luis asegura que lleva sin cobrar la ayuda pertinente desde 2014 y como él hasta un centenar de agricultores de los 750 existentes en la región: “Estamos en desigualdad de condiciones, algunos se han salido del programa de ayudas porque no son rentables sin esa subvención que, por cierto, llega de Europa. Ojalá no se diera a nadie y solo se quedase el que realmente lo valiese”apunta. En la gestión que se hace por parte de la Administración regional no se mete, pero sí apunta que «no se está haciendo bien».
Sea como fuere, al mal tiempo le pone buena cara. Sabe que tiene una explotación viable y asegura estar viendo los resultados: “Nunca lo habría imaginado y me he demostrado que soy capaz de que puedo llevar una cosecha dignamente” subraya. Todo lo demás, al tiempo.
