La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, está avanzando en el ambicioso proyecto de reintroducción del lince ibérico en la región. Este proyecto, que se enmarca dentro del programa LIFE LynxConnect, ha identificado áreas específicas en las provincias de Palencia y Zamora como zonas óptimas para el retorno de este felino en peligro de extinción. Con una inversión planificada de casi 2 millones de euros hasta 2026, la Junta busca no solo reintroducir al lince, sino también mejorar los hábitats naturales y asegurar la sostenibilidad a largo plazo de esta especie.
Primeros Trabajos y Selección de Áreas
Durante los años 2022 y 2023, la Junta inició las tareas preliminares para identificar las áreas más adecuadas para la reintroducción del lince. Estos trabajos incluyeron la búsqueda de zonas con alta densidad de conejos, principal fuente de alimento del lince, y hábitats adecuados. Tras un exhaustivo muestreo de 13 áreas de hábitat óptimo, se seleccionaron dos zonas principales: Cañones del Duero en Zamora y el Cerrato Palentino.
En el año 2024, los esfuerzos se expandieron para incluir nuevas zonas del Cerrato Palentino, desde el sur hasta el norte, abarcando áreas identificadas previamente como hábitat óptimo y nuevas áreas al norte de la autovía Palencia-Burgos.
Acciones de Mejora de Hábitats y Colaboración
En los próximos meses, la Junta finalizará los trabajos preparatorios, que incluyen la valoración de la actitud social hacia el proyecto, el establecimiento de acuerdos de colaboración con propietarios de fincas, la evaluación del riesgo de atropellos y otras posibles causas de mortalidad no natural, así como la recogida de datos sanitarios sobre enfermedades en la fauna local.
Para la mejora de los hábitats, se destinará 1 millón de euros en cotos, fincas y montes de utilidad pública. Además, se están estudiando medidas para reducir la mortalidad no natural, como los atropellos y ahogamientos en canales de riego.
Infraestructuras y Suministros
El proyecto también contempla la redacción y construcción de infraestructuras necesarias para asegurar el éxito de la reintroducción del lince. Entre estas infraestructuras se incluyen:
- Trampas, jaulas y material veterinario para el seguimiento y cuidado de los linces.
- Recintos de aclimatación o presuelta, que permitirán que los linces se adapten al entorno antes de su liberación definitiva.
- Mudas de cuarentena para realizar chequeos sanitarios a los linces antes de su liberación.
La construcción de estos recintos y mudas está en una fase avanzada de redacción, con planes específicos para dos recintos de aclimatación y ocho mudas de cuarentena en el CRAS de Valladolid.
Inversión y Próximos Pasos
La inversión total prevista para el proyecto de reintroducción del lince en Castilla y León hasta junio de 2026 es de 1,9 millones de euros, que incluyen la financiación de equipos técnicos, materiales, infraestructuras y mejoras de hábitat tanto en terrenos públicos como privados.
En septiembre de 2024, la Junta presentará al Grupo de Trabajo nacional la propuesta final de áreas de reintroducción. Esta propuesta técnica se basará en la calidad del hábitat, densidades de conejo y la aceptación social en las áreas seleccionadas en Zamora y Palencia.
El Lince: Una Especie Amenazada
El lince ibérico es uno de los felinos más amenazados del planeta. A finales del siglo XX, los atropellos, el furtivismo y el declive de las poblaciones de conejo casi llevaron a la extinción a esta especie. Gracias a los esfuerzos conjuntos de administraciones, propietarios, conservacionistas y la población local, apoyados por fondos de la UE, la situación ha mejorado notablemente en los últimos 20 años.
En el último censo de 2024, se estimó una población de algo más de 2,000 ejemplares en la península ibérica, un aumento significativo desde los 94 ejemplares contados en 2002.
Importancia de la Reintroducción del Lince
La reintroducción del lince ibérico no solo busca aumentar la población de esta especie, sino también aportar beneficios ecológicos y económicos. El lince actúa como un controlador natural de otros depredadores como el zorro y el meloncillo, lo que contribuye al equilibrio de los ecosistemas. Su dieta, basada principalmente en el conejo, también ayuda a controlar las sobrepoblaciones que causan daños a los cultivos agrícolas, beneficiando a los agricultores.
Además, la presencia del lince potencia la caza menor y mejora las poblaciones de perdiz, eliminando competidores como mustélidos y hurones. En términos económicos, la reintroducción del lince genera inversiones en mejoras de hábitat y promueve el turismo de naturaleza, convirtiéndose en un motor económico para las regiones donde se establece.
El proyecto de reintroducción del lince ibérico en Castilla y León representa un esfuerzo significativo para la conservación de una especie en peligro y la mejora de los ecosistemas locales. Con una inversión de casi 2 millones de euros y un enfoque integral que incluye mejoras de hábitat, infraestructuras y colaboración con la comunidad local, la Junta de Castilla y León está comprometida a hacer de este proyecto un éxito sostenible a largo plazo.