El índice de precios de los alimentos de la FAO* registró un promedio de 156,3 puntos en septiembre de 2015, es decir, un punto más respecto del valor notablemente reducido de agosto, pero con todo un 18,9 % menos que hace un año. Las cotizaciones del azúcar y los productos lácteos se reforzaron el mes pasado, mientras que las de los demás productos básicos se mantuvieron cerca, o apenas por debajo, de sus respectivos niveles de agosto.
Apenas sin cambios en los cereales, lo que hae que el índice de precios de los cereales de la FAO se situó en un promedio de 154,8 puntos en septiembre, esto es, casi sin variaciones respecto de agosto y un 13,1 % menos en términos interanuales. Los precios internacionales de los cereales vienen experimentando una presión a la baja desde principios de 2015, debido a las amplias reservas y a unas perspectivas en general buenas para las cosechas. Actualmente, a consecuencia de la producción récord de la presente campaña, el trigo es más de un 20 % más barato que en septiembre del año pasado. Bajo la influencia del descenso previsto de la producción mundial de maíz, las cotizaciones de los cereales secundarios han resistido mejor, disminuyendo solo un 1,4 % en comparación con septiembre de 2014. A pesar de las perspectivas de reducción de las cosechas, las cotizaciones del arroz han seguido descendiendo, aunque en septiembre lo hicieron solo en un 1,7%, prolongando la tendencia decreciente por 30.º mes consecutivo.
El índice de precios de los aceites vegetales de la FAO registró un promedio de 134,2 puntos en septiembre, ubicándose ligeramente por debajo (un 0,5 %) del promedio del mes anterior, pero alcanzando su nivel más bajo desde marzo de 2009. La caída de septiembre se debió principalmente al descenso de las cotizaciones del aceite de palma como resultado de las abundantes disponibilidades exportables, en particular en Malasia, donde la debilidad de la moneda está favoreciendo las exportaciones. Los precios internacionales del aceite de soja también disminuyeron, debido a los amplios suministros en América del Sur y a las perspectivas favorables para la producción mundial en 2015/16. Al mismo tiempo, los precios de los aceites de colza y de girasol han subido ligeramente a causa de las preocupaciones en relación con disponibilidades a nivel mundial inferiores a lo previsto.
El índice de precios de los productos lácteos de la FAO se situó en un promedio de 142,3 puntos en septiembre, es decir, 6,8 puntos (o un 5 %) más que en agosto. Este aumento se produjo tras la acusada caída del índice en el mes anterior. Mientras los precios de todos los productos básicos lácteos se reforzaron, los de las leches en polvo mostraron el mayor incremento, asociado principalmente a unas cotizaciones más elevadas en Nueva Zelandia, donde una reducción notable de los rendimientos ha dado lugar a que los agricultores redujeran la producción.
El índice de precios de la carne de la FAO registró un promedio de 170,5 puntos en septiembre, esto es, prácticamente sin variaciones desde el mes anterior. El índice ha oscilado dentro de una estrecha horquilla desde marzo de 2015. Durante este período de siete meses los precios de las aves de corral han disminuido, gracias a la reducción del costo de los piensos, mientras que los precios de la carne de bovino han aumentado debido a la fuerte demanda combinada con una oferta limitada; al mismo tiempo, las cotizaciones de la carne de cerdo se han mantenido relativamente estables. Los precios de la carne de ovino han experimentado una variación mayor, en parte a consecuencia de la oferta estacional.
Una de las subidas más importantes la tienen el azúcar, de tal forma que el índice de precios de este producto según esta entidad se situó en un promedio de 168,4 puntos en septiembre, es decir, 5,2 puntos (o un 3,2 %) más que en agosto. El aumento se debió en gran medida al clima, bajo los efectos negativos de El Niño. En el Brasil, el mayor productor de azúcar del mundo, las precipitaciones excesivas en la principal región productora limitaron notablemente la recolección de caña de azúcar, mientras que en la India, segundo productor más importante del mundo, unas lluvias monzónicas inferiores a la media afectaron negativamente a las cosechas de caña. De manera similar, informes oficiales de Tailandia, el segundo mayor exportador de azúcar del mundo, apuntan a una reducción de la cosecha de caña de azúcar en 2015/16 como resultado de una sequía prolongada. Dadas las perspectivas actuales sobre el Brasil, la India y Tailandia, es probable que el déficit de producción previsto para 2015/16 sea mayor de lo pronosticado en un principio.
