Las organizaciones profesionales agrarias valoraron hoy positivamente el Proyecto de Ley Agraria aprobada por el Consejo de Gobierno aunque esperan que en su tramitación parlamentaria se incluyan medidas concretas que permitan que se cumpla el espíritu de la ley y se dé protagonismo al agricultor profesional.
En este sentido, el presidente de ASAJA en Castilla y León, Donaciano Dujo, echó de menos que no regule aspectos como el medio ambiente, la educación y la sanidad. «Que sea la Ley Agraria y de Desarrollo Rural de Castilla y León», precisó.
Por eso, pidió que se convierta en una ley del Gobierno regional y no sólo de la Consejería de Agricultura y Ganadería. «Echamos de menos que no sea más ambiciosa», puntualizó. Al tiempo, que recordó que todavía se pueden introducir mejoras en su tramitación en las Cortes, motivo por lo que reclamó que “se perfile y mejore”, para lo que solicitó el compromiso y colaboración de todos los partidos con presencia en el parlamento regional.
No obstante, matizó que ASAJA siempre ha entendido que se trata de una regulación «necesaria y merecida para el sector» que ahora va a ver la luz. Por eso, destacó la importancia de que reconozca la figura del agricultor y ganadero y de que unifique aspectos importantes como las figuras de calidad, la concentración parcelaria y las infraestructuras. «Es fundamental que recoja el desarrollo de todo lo relacionado con el sector, las cuestiones esenciales de la agricultura y la ganadería».
También el secretario general de UPA en Castilla y León, Julio López, aseguró que desde La Alianza por la Unidad del Campo UPA-COAG se considera que la ley es «buena y necesaria», pero que en el trámite parlamentario deben definirse algunas cuestiones para dar «prioridad absoluta a los agricultores profesionales». En su opinión, esto supondrá facilitar el relevo generacional y la incorporación de los jóvenes al campo para dar un vuelco a la pirámide y otorgar así el «protagonismo al modelo social agrario de Castilla y León». «Ahora hay que ponerlo negro sobre blanco. Ahí nos jugamos que sea una buena ley o no», subrayó.
Por su parte, el coordinador regional de UCCL, Jesús Manuel Palacín, quien también insistió en que es un buen proyecto de ley, lamentó que no sea «más ambiciosa». «Parecía que iba a serlo y al final no lo va a ser tanto», mantuvo. Además, criticó que no se haya tenido más en cuenta a las organizaciones profesionales agrarias en su elaboración. «Nos hubiera gustado tener más interlocución en el desarrollo de la ley», argumentó.
Para UCCL sería fundamental que se llevara a cabo el desarrollo reglamentario del estatuto del agricultor a título principal, que defina con claridad quién lo es y quién no, porque «estamos hablando de que probablemente Castilla y León sea la región con más profesionales».
Finalmente, desde la organización echan de menos que la Administración defina su papel en el equilibrio de la cadena de valor. «No puede ser un mero espectador entre productor, industria y distribución. Tiene que tener un papel protagonista».
