Según los datos registrados por Agroseguro, los daños sufridos por los agricultores y ganaderos asegurados en Navarra por los siniestros producidos en 2021 han supuesto indemnizaciones por valor de13,8 millones de euros. Esta cifra ya supone un 25% más que la registrada en todo el año anterior.
Agroseguro ha trabajado para dar una respuesta rápida y eficaz a los asegurados ante este aumento de siniestralidad, y ha conseguido mantener el ritmo habitual en el proceso de peritación de daños y pago de indemnizaciones, actualmente muy avanzado. En concreto, Agroseguro ya ha abonado a los productores navarros asegurados el 70% de las indemnizaciones, lo que se traduce en 9,8 millones de euros, y en el caso de algunas líneas –uva de vino, herbáceos o cereza–, ya se encuentran abonadas más del 90% de las indemnizaciones. En total, son 23.470 los siniestros comunicados hasta el momento, y más de 34.400 las hectáreas siniestradas.
Las hortalizas (con 4,4 millones) y la uva de vino (con 2,6 millones) son las principales producciones afectadas por los fenómenos meteorológicos, aunque las indemnizaciones también incluyen a productores asegurados de cultivos herbáceos (1,7 millones), frutales y cereza (1,2 millones), cultivos forrajeros, frutos secos, níspero u olivar. Las líneas de seguros pecuarios registran siniestros, hasta el momento, por valor de 3,6 millones de euros en indemnizaciones.
Por riesgo, las tormentas de pedrisco –con más de 4,2 millones en indemnizaciones– han sido las principales responsables de los siniestros sufridos en la región. De entre todas, destaca la registrada a mediados de agosto sobre Ablitas, Cabanillas, Murchante o Ribaforada, que dejó fuertes daños en producciones de tomate, pimiento o cebolla.
A continuación, se sitúa la helada, con 2,1 millones de euros en indemnizaciones. La mayor parte corresponde a viticultores, principalmente por la fuerte bajada de temperaturas sufrida a mediados de abril en las comarcas de Tierra Estella, Media y La Ribera, así como en la zona noroeste de la comunidad foral.
Por su parte, la lluvia y las inundaciones dejan por el momento 1,6 millones en daños, incrementados tras la DANA registrada a principios de septiembre, que se dejó sentir con mucha intensidad en la zona media de la Comunidad Foral y en la Ribera, especialmente sobre cultivos hortícolas de municipios como Tudela, Caparroso, Lodosa o Lerín, entre otros.
El último trimestre del año resulta fundamental para el campo navarro, porque es el momento de asegurar gran parte de las principales producciones de la región. Actualmente se encuentran abiertas las modalidades de otoño de las líneas de seguro de uva de vino, así como de herbáceos extensivos (cereales, leguminosas, oleaginosas), olivar o frutos secos. Cuentan con protección frente a todos los riesgos, entre ellos la sequía, la helada o el pedrisco, muy frecuentes en Navarra y responsables cada año de la mayor parte de los siniestros para los agricultores navarros.
