Las cooperativas vitivinícolas francesas, italianas y españolas piden al Parlamento Europeo que tenga en cuenta el estudio de impacto de la propuesta sobre el Reglamento de Uso Sostenible de Plaguicidas

Agronews Castilla y León

12 de enero de 2023

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Las cooperativas vitivinícolas francesas, italianas y españolas, que producen la mitad del vino europeo, casi 75 millones de hectolitros al año, piden a los eurodiputados en una carta abierta que tengan en cuenta el estudio de impacto de la propuesta de la Comisión sobre el Reglamento de uso sostenible de plaguicidas (SUR) para modificarlo adecuadamente.

En una carta abierta a los eurodiputados señalan que acogen « con satisfacción la decisión del Consejo de pedir a la Comisión un estudio de impacto adicional sobre SUR que tenga en cuenta el impacto de la propuesta en la seguridad alimentaria. De hecho, es necesario disponer de todos los datos para tomar decisiones racionales e informadas que tengan un impacto a largo plazo en la capacidad de producción agrícola europea.»

Por esto piden al Parlamento Europeo que se tome todo el tiempo necesario y disponga de todos los datos para modificar el texto de la Comisión, aseguran que la propuesta actual es «es poco realista, ideológica y lleno de errores. Así lo demuestra el retroceso parcial que la propia Comisión ha hecho con su documento oficioso sobre las zonas sensibles».

Las cooperativas vinícolas aseguran que una reducción del 60% o del 20% no tiene sentido sin alternativas claras y sin un calendario adecuado y realista, condiciones necesarias para acompañar a los agricultores en este camino.

«Debemos tener en cuenta los diferentes cultivos, las alternativas concretas disponibles para cada cultivo y cada plaga. Los pesticidas suponen un coste para los viticultores y estaríamos encantados de prescindir de ellos. Por ejemplo, en 2022, hicieron que se desarrollaran menos enfermedades, y por lo tanto hubo menos uso de pesticidas en los viñedos. Como viticultores, somos los primeros interesados en unas condiciones de producción seguras -el agricultor es el primero en exponerse a los posibles efectos del uso de plaguicidas nocivos- que respeten el medio ambiente y el entorno natural, para ofrecer productos de la más alta calidad, con las máximas garantías sanitarias, y contribuir a la conservación de nuestros suelos, la calidad de nuestras aguas y la diversidad de nuestra flora y fauna. La viticultura se practica en un entorno abierto y complejo, sujeto a muchas variables predecibles e impredecibles (mal tiempo, alta probabilidad de verse afectado por plagas y enfermedades, diversidad de cultivos, cambio climático) que pueden condicionar la producción». aseveran en la citada misiva remitida al Parlamento y la Comisión Europea.

Establecer objetivos » políticos «, afirman, es hacer propaganda sin responder realmente a las necesidades y características agronómicas reales. La política de la UE sobre productos fitosanitarios debe poner en pie de igualdad la sostenibilidad medioambiental y la sostenibilidad económica. Esto significa que la transición hacia una reducción en el uso de productos fitosanitarios debe hacerse a un ritmo que permita la aplicación de métodos de control alternativos, que deben fomentarse con inversión pública.

Además, reclaman que se establezca un Marco Legislativo sobre Nuevas Técnicas Genómicas (NGT) lo antes posible, que permita prospectivamente el rápido desarrollo de variedades más resistentes a las plagas y, mientras tanto, esté dirigido a permitir las necesarias pruebas de campo.

«Creemos que la propuesta que la Comisión Europea ha puesto sobre la mesa relativa al Reglamento sobre el uso sostenible de los plaguicidas debe cambiarse radicalmente porque está alejada de la realidad del mundo agrícola y vitivinícola y es inadecuada para alcanzar los objetivos que propone». concluyen.



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