La pasada semana, tuvo lugar una interesante conferencia sobre conservación de aves necrófagas en el Campus de Palencia (UVa) impartida por E. Jordán Muñoz-Adalia, miembro del Colectivo Azálvaro. La charla, que se incluía dentro del ciclo de conferencias de Aula de Cultura, se centró sobre la importancia de las aves necrófagas en el mantenimiento del equilibrio ecológico de los ecosistemas, haciendo hincapié en su papel como agentes sanitarios y responsables del reciclado de nutrientes.
Durante la conferencia, a la que asistieron alumnos de diversas titulaciones y público no estudiantil, se profundizó en el estado de conservación de las especies carroñeras ibéricas (buitre negro, buitre leonado, alimoche, quebrantahuesos y milanos, entre otras) y se identificaron sus principales causas de amenaza.
Otros temas tratados tuvieron que ver con el Sistema de Gestión Ambiental ARCAN (Autogestión de la Red de Comederos de Aves Necrófagas) un sistema de gestión único y operativa de la Red de Comederos de Aves Necrófagas puesto en marcha en Segovia por el Colectivo Azálvaro, creado como una forma alternativa a la prestación de servicio realizada a los ganaderos e industrias cárnicas, para la recogida, el transporte y la transformación y/o eliminación, o valoración energética, de los Sandach, a través del depósito autorizado en muladares/comederos, así como en la labor conjunta que esta ONG desempeña en colaboración con el sector ganadero, ofreciendo un servicio de proximidad, tramitando su solicitud para acogerse al Decreto 17/2013 de alimentación de necrófagas e impulsando la imagen de la ganadería como actividad que mejora la biodiversidad y contribuye a la coexistencia con la vida silvestre.
Finalmente, se abrió un turno de debate en el que se trataron temas de actualidad como los cambios normativos en Castilla y León que establece el nuevo Decreto 17/2013 que desarrolla y regula el uso de determinados subproductos animales no destinados al consumo humano (SANDACH) para la alimentación de especies necrófagas de interés comunitario, y que afectan al depósito de cadáveres de las ganaderías no intensivas autorizadas en las denominadas ZEPAEN (Zonas de Protección para la Alimentación de Especies Necrófagas) donde podrán no ser recogidos del campo y en muladares para las demás explotaciones; o el letal efecto del compuesto veterinario diclofenaco en las poblaciones de aves rapaces.
“Poder participar en Aula de Cultura es una gran oportunidad de dar visibilidad a la labor de conservación que se desarrolla desde Colectivo Azálvaro”. Explica Muñoz-Adalia.
