Las primeras estimaciones de LA UNIÓ de Llauradors, tras consultar por las diversas zonas productoras, indican que la cosecha de aceitunas de la Comunitat Valenciana podría sufrir una merma considerable de alrededor del 75% con relación a la del año anterior.
La bajada del volumen productivo es generalizada en la mayor parte de las zonas, aunque destacan las comarcas de Castellón con un 85% menos, las de Valencia con el 74% y las de Alicante, que es donde en principio menos descenderá, con el 68%.
Con esta gran merma, la previsión de la organización agraria es que los productores dejen de ingresar una cifra cercana a los 70 millones de euros. En las comarcas de Valencia serían 25 millones de euros menos los que percibirían los olivicultores, 22,6 millones en las de Castellón y 21,9 las de Alicante.
La combinación de adversidades meteorológicas durante el primer semestre de este año es la causa fundamental de ese gran descenso de la producción previsto para este año en la Comunitat Valenciana. Las lluvias y humedades de la primavera, sobre todo en abril, o el pedrisco y las elevadas temperaturas de mayo han provocado masivas defoliaciones por hongos en los árboles y a su vez las heladas, frío y lluvias persistentes que hubo provocaron la falta de floración o cuajado con la consiguiente merma de la cosecha.
En este sentido, desde LA UNIÓ se insta a incentivar la contratación de la línea de seguro del olivar que tiene una baja implantación en la Comunitat Valenciana y para ello pide una bonificación por parte de Agroseguro del 10% para todas las personas aseguradas que contraten por primera vez y así mismo que la Conselleria de Agricultura subvencione hasta el máximo autorizado por la Unión Europea los seguros agrarios para todas aquellas personas agricultoras profesionales.
Además, LA UNIÓ recuerda que ya ha propuesto tanto al Ministerio de Agricultura como a la Conselleria de Agricultura una nueva ayuda agroambiental, dentro del Plan Estratégico de la PAC que entrará en vigor el próximo enero, para los cultivos de secano de la Comunitat Valenciana: olivar, frutos secos, viña y cereal, debido a la importancia que tienen para la actividad económica de las zonas de interior, en riesgo de despoblación, y que por sus características son menos competitivas que las zonas de regadío. Con ello aboga por dar una ayuda adicional de 100 euros/hectárea para que realicen prácticas beneficiosas para el medio ambiente como la lucha biológica contra plagas y enfermedades de cada uno de estos cultivos o prácticas sostenibles para el cultivo.
Cabe resaltar también que a esta reducción de producción y descenso de ingresos en la producción del olivar de la Comunitat Valenciana hay que sumar las malas perspectivas para la almendra, por lo que nos encontramos ante uno de los peores años para las zonas de secano de interior por la mala situación de dos de sus cultivos más importantes.