Los Estados miembros de la UE, durante el Comité Permanente de la Cadena Alimentaria y de Sanidad Animal, han respaldado la propuesta de la Comisión de establecer unas normas claras de etiquetado, especialmente a lo que al origen se refiere, para la carne de cerdo, oveja, cabra y la carne de aves de corral, ya sea en sus variantes de fresca, refrigerada o congelada.
Con estas nuevas reglas, se asegura desde Bruselas, los consumidores de la UE podrán saber de dónde proviene la carne que compran. Los consumidores serán capaces de tomar decisiones bien fundamentadas teniendo en cuenta el concepto de «origen», «criados» y «sacrificado», cada concepto está claramente definida a nivel de la UE.
La propuesta introduce un sistema de etiquetado obligatorio que establece un vínculo entre la carne y el animal de la que obtuvo. De acuerdo con las nuevas reglas, los animales nacidos, criados y sacrificados en el mismo Estado miembro pueden ser etiquetados con el término «origen: más el nombre del citado país», mientras que en otros casos se indicará dónde se ha criado y sacrificado en la etiqueta.
Un conjunto detallado de reglas (se adjuntan a estas líneas en inglés) se ha establecido adaptada a cada tipo de producción con el fin de garantizar que el lugar de cría es de hecho donde el animal pasó una parte importante de su vida.
El nuevo Reglamento se aplicará del 1 de abril de 2015, a fin de permitir al sector agroalimentario para adaptarse.