La lengua azul sigue causando importantes problemas a los ganaderos andaluces
La Junta de ndalucía en su boletín agraria semanala repasada la situación de esta enfermedad en la región. La provincia de Cádiz está en el ojo de huracán del virus de la lengua azul al ser la única provincia española donde coinciden dos de los serotipos de esta enfermedad sobre los que existe una alerta sanitaria ganadera.
En el último informe del Ministerio de Agricultura, donde se analiza la situación de los últimos años en relación con la lengua azul, se deja constancia de que en 2015 se detectaron una veintena de casos de lengua azul, 11 del serotipo 4 y 9 del serotipo 1, ambos han coincidido en la provincia de Cádiz; además el serotipo 4 también se detectó en el provincia de Huelva y el serotipo 1 en Sevilla, Jaén y Albacete.
La lengua azul, que a principios de este siglo causó estragos entre las cabañas ganaderas del sur de España, saltó a la península desde el Norte Africa, zona en la que se conocía bien la virulencia de esta enfermedad, que se transmite a través de un mosquito.
Los primeros casos de lengua azul se detectaron en las provincias andaluzas de Cádiz y Huelva y de ahí se extendió a otras provincias limítrofes andaluzas, extremeñas y castellanomanchegas.
La voracidad de esta enfermedad que afecta al ganado ovino, bovino y caprino mantiene activo un calendario de vacunación anual de ganado y protocolos de alerta y actuación para frenar cuanto antes cualquier brote.
La Junta de Andalucía, como el resto de las autonomías afectadas por la zona de restricción, programan un riguroso calendario de vacunación para evitar las pérdidas millonarias que se produjeron a principios de siglo con los primeros casos del serotipo 4 de lengua azul.
En los últimos meses de 2015, la situación ha cambiado sustancialmente respecto a la zona geográfica del país en alerta, debido a la aparición del serotipo 8 de lengua azul en el sur de Francia, lo que ha desatado la alarma entre los ganaderos de las regiones españolas del Norte, es decir la franja fronteriza francesa.
Esto ha hecho que las autoridades sanitarias españolas hayan tomado medidas para evitar que atraviese la frontera, intentando proteger las cabañas ganaderas de las comunidades autónomas de Aragón, Cataluña y Navarra donde existe obligación de vacunar de forma preventiva contra dicho serotipo de lengua azul y de forma voluntaria se recomienda que también se haga en el País Vasco.
La alerta generada por los brotes de serotipo 8 ha hecho que el Ministerio de Agricultura remita a la Comisión Europea una actualización de programa oficial de actuación ante la enfermedad de la lengua azul con las medidas preventivas que se van a tomar en la franja limítrofe con el país galo.
En las provincias que están libres de riesgo también se toman medidas preventivas para detectar la propagación de la enfermedad.
